Políticos expresan, sin embargo, una inobjetiva presunción de la realidad.
La elaboración de la Constitución de la Ciudad de México que contendrá derechos de vanguardia, derivados de una lucha de la izquierda, requiere redoblar esfuerzos para vencer obstáculos políticos que imponen diversas fuerzas y el tiempo tan breve para concluir el documento, señalaron legisladores y constituyentes perredistas en la presentación del libro “Sobre la Constitución de la Ciudad de México” de Anabel Ortega Muñoz.
Los diputados locales Elizabeth Mateos Hernández y Raúl Flores García, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), así como Jesús Ortega Martínez, diputado constituyente, y Pablo Gómez Álvarez, ex senador de la República y consejero nacional del PRD, destacaron la importancia de una mayor difusión del trabajo que realiza la Asamblea Constituyente, a fin de propiciar la participación ciudadana mediante propuestas que contribuyan a fortalecer la nueva normatividad.
La presidenta de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables y vocera de la fracción parlamentaria del PRD en la ALDF, Elizabeth Mateos, dijo que la construcción de la Constitución de la Ciudad de México implica una tarea muy compleja, ya que se debe realizar en tiempos cortos porque el 31 de enero deberá estar lista, por lo cual en la ALDF ya se han integrado mesas de trabajo para elaborar las leyes secundarias.
Tras realizar un repaso del sistema municipalista y resaltar el papel de la izquierda en el fortalecimiento de la democracia en la Ciudad, consideró que son fundamentales las reformas del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, de la Ley de Participación Ciudadana y expedir una Ley Orgánica de las Alcaldías para el funcionamiento del sistema de alcaldes, que tendrán la atribución de administrar la demarcación pero que serán vigilados por los concejales para garantizar mayor transparencia.
La alcaldías, refirió, son un modelo único en todo el país porque no será como las presidencias municipales que hay en los estados y tendrá más facultades de las que ahora tienen las delegaciones, además de que deberán garantizar pluralidad; es decir, que estén representadas todas las fuerzas políticas para que no sean gobiernos unipersonales. Por ello, es necesario establecer reglas muy claras en el tema de los recursos y mayor autonomía en sus funciones.
El diputado Raúl Flores García, vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD en la ALDF, celebró la iniciativa de la diputada Elizabeth Mateos para traer la presentación de la obra a la Asamblea Legislativa, ya que ofrece la oportunidad de divulgar los avances en la Constitución de la Ciudad de México, así como los esfuerzos realizados desde la Asamblea Constituyente para que la sociedad cuente con un texto con preceptos jurídicos de avanzada y de vanguardia, armónico con la gama de derechos y libertades que se han impulsado desde los gobiernos de izquierda en la capital del país.
Manifestó que a la fecha hay muchas dudas sobre lo que es y el trabajo que realiza la Asamblea Constituyente, por lo cual el libro es una guía para indagar sobre la base jurídica de nuestra nación e informar a la sociedad que el objetivo de la Constitución es conformar un documento superior a la Carta Magna federal, en cuanto a garantía de los derechos.
Anabel Ortega Muñoz, autora de la obra, indicó que el texto establece los elementos históricos que integran la construcción de la Constitución, la forma en la que se fue gestando esta normatividad que delineará el rostro de la Ciudad y será la primera que contendrá temas de vanguardia como la despenalización del aborto, los matrimonios igualitarios, el uso de la marihuana y otros. Además, la Constitución otorga facultades renovadas derivadas de la reforma política en materia de seguridad e impartición de justicia.
Pablo Gómez, ex senador de la República, señaló algunas insuficiencias que tiene el proyecto de Constitución y los puntos que se deben resolver en pocos meses, tales como la inclusión del principio de máxima publicidad y el derecho al acceso a la información. Asimismo, definir los plazos de trabajo en los congresos para darle fuerza y dignidad al Poder Legislativo y realizar un cambio profundo en la manera en la que se comportan su integrantes, quienes realizan las actividades más importantes de la agenda pública y los cambios que afectan de manera directa a la ciudadanía, porque es en las leyes donde se cristalizan sus derechos.
Tras lamentar que la información del trabajo que realiza la Asamblea Constituyente es muy bajo, expuso que la exigencia de las constituciones modernas es plasmar los derechos, explicarlos y desagregarlos como una respuesta a los anhelos sociales.
En tanto, Jesús Ortega Martínez llamó a vencer los obstáculos como los que puso el Congreso de la Unión y los de las fuerzas políticas para concluir la elaboración de la Constitución en los plazos previstos en la ley. Indicó que algunos sectores políticos y sociales que no quieren una Constitución piensan que si no se concluye para el 31 de enero no habrá una normatividad para la Ciudad, de ahí la apuesta para alargar las discusiones, intención que se debe revertir.
Consideró como un error el poco tiempo que dieron para la elaboración de la Constitución ya que a la fecha no se ha iniciado la discusión de ninguno de los artículos y apenas se instalaron las comisiones para recibir propuestas de sus integrantes y posteriormente de la ciudadanía, situación que no se previó en la reforma al artículo 122.
Tras resaltar que los medios de comunicación, la ALDF, el Congreso de la Unión y la Asamblea Constituyente deben fortalecer los mecanismos de divulgación del contenido y del proceso de construcción de la nueva normatividad, expuso que se deben dar más facultades al Congreso de la Ciudad de México para hacer efectiva la representación popular, crear un Gobierno de Gabinete, un Tribunal constitucional que no sea parte del Poder Judicial, e instalar un Congreso Metropolitano, a fin de resolver los problemas que comparte la ciudad con las entidades vecinas.