Londres, 22 nov (PL) Las recientes declaraciones del ganador de las elecciones presidenciales de Estados Unidos Donald Trump acerca de los tratados de libre comercio generan hoy un creciente malestar entre socios tradicionales de Washington.
Este martes, los principales medios económicos del mundo repiten las ideas de Trump difundidas el lunes en las que el electo presidente arremete contra el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), lo que dividió a los firmantes acerca de sacar adelante ese tratado.
El presidente que asumirá el 20 de enero próximo anunció que al tomar el mandato retirará a Estados Unidos del Acuerdo.
Este documento fue firmado inicialmente en junio de 2005 por Chile, Brunei, Nueva Zelanda y Singapur, con el objetivo de crear una futura zona de libre comercio interregional entre Asia y América.
A él se unieron posteriormente Perú, Australia, Estados Unidos, Vietnam, Malasia, Canadá, Japón y México.
Las negociaciones del TPP, promovido por Washington, fueron elemento clave de la política exterior del todavía presidente estadounidense Barack Obama.
Uno de los objetivos fue priorizar la relación con la región de Asia-Pacífico para hacer frente a la influencia de China, que no forma parte del acuerdo.
El 5 de octubre de 2015 finalizaron arduas negociaciones que sentaron las bases del acuerdo comercial más ambicioso entre los 12 países miembros, que representan cerca del 40 por ciento del producto interno bruto (PIB) mundial.
Los últimos obstáculos versaron sobre el acceso a los mercados de productos lácteos, las cuotas agrícolas, la automoción, las leyes de propiedad intelectual y los plazos de patentes farmacéuticas.
Pero la víspera, Trump divulgó un vídeo en el cual señala que entre las medidas para sus primeros 100 días de gobierno está la retirada del TPP.
En esa cuerda, durante esta jornada el gobierno de Japón evalúa que el acuerdo comercial TTP no tiene sentido sin Estados Unidos, mientras Australia se alinea con México en su propósito de seguir adelante.
Para los países interesados en seguir con el acuerdo, está latente la esperanza de que Trump no lleve a efectos sus augurios.
Varios de los socios asiáticos del Acuerdo Transpacífico mostraron hoy su malestar por las declaraciones.
El primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, exhibió su contrariedad y dijo a la prensa que una alternativa es la continuidad del tratado con los otros socios.
En Australia, el primer ministro Malcolm Turnbull dijo confiar en un cambio en la posición de Trump, mientras consideró el tratado como de interés para su país.
Para Tokio, en tanto, el secretario del gabinete, Yoshihide Suga, rechazó hacer comentarios porque Trump aún no tomó posesión de la Casa Blanca, dijo.
Sin embargo, precisó que sin Estados Unidos el TPP carecería de sentido, el balance fundamental de sus beneficios podría colapsar, y la renegociación es imposible.