Integrantes de La Caravana de Madres Centroamericanas que buscan a sus hijos migrantes desaparecidos en su tránsito por México, visitó el Reclusorio Preventivo Varonil Norte, en donde recibieron de parte de las autoridades del sistema penitenciario una lista de las personas centroamericanas que se encuentran recluidas en las cárceles de la Ciudad de México para que, en caso de ser identificados, se analicen los expedientes y encontrar alternativas para su liberación.
En la visita, se identificó a una persona de origen hondureño que está preso y no tiene contacto con su familia desde hace nueve años, y a otro de nacionalidad salvadoreña que ya fue liberado, por lo que las autoridades carcelarias se comprometieron a buscarlo para informar a sus familiares sobre su paradero.
La localización de los centroamericanos fue realizada por personal de seguridad del centro penitenciario donde se quien, una a una, las fotografías de los migrantes desaparecidos en su tránsito por México, después de que los miembros de la caravana las colocaron en una mesa.
En el acto estuvieron presentes el organizador de la caravana, Sergio Salazar, tres madres y dos padres de la organización, así como Roberto Campos, en representación del secretario de Desarrollo Social, José Ramón Amieva, el subsecretario del Sistema Penitenciario, Hazael Ruiz Ortega, el director del reclusorio Norte, Rafael Oñate Farfan, y la vicepresidenta de la Comisión Especial de Reclusorios de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Rebeca Peralta León.
Al respecto, la legisladora local comentó que los familiares de los migrantes desaparecidos “nos solicitaron ayuda para darles información sobre los expedientes de los centroamericanos y los nombres de quienes han estado presos desde hace 16 años”.
Indicó que junto con las autoridades del Sistema Penitenciario, “establecimos el compromiso de revisar los expedientes correspondientes al periodo 2000-2016, principalmente los de 2001, año en que se registró el mayor número de migrantes desaparecidos en territorio nacional en su intento de llegar a Estados Unidos”.
De hecho, agregó, se les entregó una lista de los presos centroamericanos para que la revisen y, si detectan a algún desaparecido, se busquen las alternativas para su liberación; “se encontró el caso de un hondureño que no tiene contacto con su familia desde hace nueve años, pero que una de las madres conoce a la familia del joven porque son de la comunidad y se comprometió a avisarle a su familia y así reencontrarse”.