El defensor de derechos humanos y promotor de la paz, Alfredo Rojas Díaz Durán denunció que el país se ha convertido en un escenario de violaciones a los derechos humanos y al medioambiente agrediendo a pequeños propietarios y a pueblos originarios pero más grave aún es que ninguna autoridad ni nada impida estas violaciones que en aras de un mega proyecto no les interesa ni la salud ni el equilibrio ecológico o biodiversidad regional por lo que hay que tomar otras medidas.
En el marco de la reunión regional de La Madre Tierra, realizada en Ocosingo, Chiapas, el defensor de derechos humanos Alfredo Rojas Díaz Durán denunció la impunidad con la que actúan las empresas extractivas de gran calado en diversas partes del país al devastar al medioambiente, provocar éxodo, deprimir la economía de la población, desconocer el derecho de los habitantes a ser consultados sobre la actividades que provocan los desequilibrios ambientales.
En la conclusión que tuvieron los diversos representantes mayas, lacandones, totziles, quetzales, entre otros, le manifestaron su apoyo en la conformación de un frente común que detenga los ecocidios que están ocurriendo en diversas partes del país.
Alfredo Rojas les explico la devastación que provocan ciertas industrias hoteleras, petroleras, gaseras, maderera, mineras al medio ambiente como sucede en Sonora, Zacatecas, Guerrero, Michoacán sin que nadie ni nada los detenga con el cuento de que van a dar empleo, van a resarcir al medioambiente afectado y que inyectarán inversiones a la comunidad, cosa totalmente alejada de la realidad.
Alfredo explico durante su conferencia magistral que las empresas avaladas por funcionarios corruptos permiten que se rompan los equilibrios ecológicos y se violen los derechos humanos de la población tanto de los pueblos originarios como ejidatarios y pequeños propietarios a quienes se les despoja de sus bienes para instalar sus negocios porque otro funcionario entregó una concesión de explotación sobre sus tierras a un tercero quien llega en muchos casos a despojarlos de sus tierras.
Alfredo Rojas expuso lo que están padeciendo las comunidades de Sonora y en particular los niños, mujeres y viejos quienes son los más susceptibles de la contaminación y que por estas actividades padecen de cáncer de piel, leucemia así como sufren de enfermedades crónicas en la vista, pulmones, riñón y el corazón al detectárseles materiales pesados en su sangre proveniente de estas industrias que no tienen cuidados preventivos ni quieren hacerse responsables de lo que han causado a la salud de miles de personas.
Están violando las empresas el Acuerdo 169 de la OIT y el Acuerdo de Roerich ya que el Estado mexicano se comprometió en consultar a las comunidades y actuar con su consenso y autorización así como evitar que se destruyan los centros religiosos y ceremoniales como lo está haciendo el estado islámico.