Monedero cierra el año con los últimos datos El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó acerca de una de las desigualdades que más efectos tienen en las mujeres del país: la carga de trabajo doméstico no remunerado y de cuidados.
De acuerdo a los resultados de la Cuenta Satélite del Inegi sobre el trabajo remunerado de los hogares, durante 2015 el valor económico del trabajo no remunerado doméstico y de cuidados alcanzó un nivel equivalente a 4.4 billones de pesos, lo que representó el 24.2 por ciento del PIB del país.
En términos reales este valor registró un crecimiento anual de 4.1 por ciento. Su valor en el PIB supera al de actividades como manufactura y comercio.
En 2008 la aportación masculina era del 4.6, para 2015 creció a 6.2; en tanto que la aportación femenina –la mayoritaria- en 2008 fue de 15.8 y para 2015 aumento a 18.0 por ciento del PIB.
La mayor parte de las labores domésticas y de cuidados fueron realizadas por las mujeres, con el 77.2 por ciento del tiempo que los hogares destinaron a estas actividades, que correspondió, a su vez, al 74.3 por ciento si se habla en términos del valor económico.
Una desigualdad de género –de las más altas en el concierto de naciones latinoamericanas-, que causa efectos muy negativos en el bienestar de las mujeres, de las familias y en el desarrollo integral del país.
Claramente se aprecia en la grafica que las actividades que absorben el mayor tiempo son: cuidados y apoyo, y alimentación. La primera es la de mayor valor económico, en su dimensión con el PIB. (Ver gráfica)
Por eso los hogares con mayor carga de trabajo no remunerado para las mujeres son los que tienen hijos menores de 6 años y los más pobres, entre otras razones porque no pueden pagar servicios de salud.
En 2015, los resultados en cifras netas per cápita (el sueldo neto que podrían percibir los miembros del hogar por realizar una actividad similar en el mercado), mostraron que cada persona participó en promedio con el equivalente a 35 mil 131 pesos anuales por sus labores domésticas y de cuidados.
Al desagregar este valor según el género de quien realizó estas actividades, se observó que el trabajo de las mujeres tuvo un valor equivalente a 49 mil 586 pesos, mientras que el de los hombres fue de 18 mil 109 pesos durante el mismo año.
Lo que significa que el país no podría funcionar en su dinámica económica, política o social sin la aportación que hacen estas mujeres, además pagarlo como sueldo sería incosteable.
El hecho de que el 77.2 por ciento de las horas destinadas a las labores domésticas y de cuidados realizadas en el hogar recaiga exclusivamente en las mujeres representa en primer término un importante obstáculo para que ellas se puedan integrar al mercado laboral o al trabajo asalariado, tiene efectos en los niveles de pobreza del país y de las mujeres.
La principal causa de que el mercado laboral femenino sea tan precario es la limitación que tienen, por eso trabajan pocas horas, con salarios más bajos y en microempresas.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) recomendó a México contar con políticas públicas que atiendan este grave problema.
PD:
En 2017 el Salario Mínimo diario paso de 73.64 a 80 pesos, un incremento de 9.58 por ciento; sin embargo para los contractuales será de 3.9 por ciento, una camisa de fuerza para los sindicatos.
Sin embargo, los 80 pesos están por debajo de la canasta alimentaria de Coneval. Otra novedad importante es el aumento en las tasas de interés. Banco de México (Banxico), incrementó la tasa de referencia 0.50 puntos porcentuales, con lo cual la tasa de interés pasa de 5.25 a 5.75.
Se prevé que para 2017 la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), active diversos incrementos en su tasa de interés, que obviamente se repetirán aquí en México, a través de Banxico. Nuevos precios de los créditos, la intención es atraer la inversión extranjera, a pesar de Trump.
Evidentemente esto afectará la inflación, se estima que llegará a 4.0 por ciento o más, con menor crecimiento económico, según Banxico de 1.6 por ciento para 2017. Un año difícil, por decir lo menos.