Washington, 18 mar (PL) Tres de los planetas del recién descubierto sistema Trappist-1 reúnen las condiciones ideales para el surgimiento de vida, aseguran hoy científicos de la universidad de Harvard, de Estados Unidos.
Los investigadores opinan que los cuerpos celestes de Trappist-1, revelados por la Administración estadounidense de la Aeronáutica y el Espacio, están situados tan cerca los unos de los otros que las moléculas pueden viajar entre ellos.
Ese dato aumenta las posibilidades de abiogénesis en el sistema, es decir, la aparición de organismos vivos a partir de materia inerte.
En este sentido, los expertos creen que si un meteorito golpea la superficie de uno de los planetas los escombros resultantes pueden volar hacia un cuerpo celeste cercano; esto podría hacer la vida alienígena en el sistema planetario recién descubierto aún más probable de lo que se pensaba hasta ahora.
Tres de los planetas del sistema -‘e’, ‘f’ y ‘g’- se encuentran en lo que en astronomía se conoce como zona de habitabilidad, o sea, tan alejados de la estrella central que las temperaturas en ellos no superan los 100 grados Celsius, pero tampoco se llega a cero.
La comunidad científica incluso cree que puede haber agua, elemento indispensable para el surgimiento de la vida como la conocemos.
Los otros tres planetas de Trappist-1 están demasiado cerca de la estrella y en su superficie no puede hallarse agua a causa de que las temperaturas son demasiado altas; por su parte, el séptimo objeto del sistema está demasiado lejos del centro y es muy frío.