Por Guillermo Robles Ramírez
A principios de la semana pasada autoridades de la Secretaría de Salud lanza un llamado a los coahuilenses para protegerse del “golpe de calor”, dengue y chicongunya.
Y eso que todavía no inicia la canícula que es un evento climático que consiste en una disminución de lluvias, conocido como sequía veranillo y en nuestro país inicia el 14 de julio para acabar el 24 de agosto, siendo Coahuila uno de los nueve estados que más afecta.
Las altas temperaturas que se han registrado en las ciudades del país y que se prevé continúen durante todo el verano, ameritan extremar los cuidados para evitar la deshidratación, el llamado golpe de calor y enfermedades gastrointestinales.
Y aunque parecieran recomendaciones hechas para hombres, mujeres, niños y adultos mayores, esto también incluye a aquellos seres, que merecen toda una atención, que también se enferman y que igual sufren las consecuencias, es decir, el mejor amigo del hombre: el perro.
Según especialista los perros no tienen un sistema muy eficaz para eliminar el calor corporal, ya que ellos no poseen glándulas sudoríparas por todo el cuerpo, como las personas, ellos solamente presentan este tipo de glándulas en sus patas, lo cual resulta insuficiente por lo que recurren a la ayuda del jadeo, que es la respiración acelerada para que por medio de la evaporación puedan refrescarse un poco.
Hay quienes opinan que un perro bravo se debe a las tierras calientes de la localidad, pero no principalmente la causa de su agresividad, el calor es uno de los factores que influyen en el comportamiento de un perro sino es precisamente en esta temporada cuando el número de ataques crece.
Lo anterior, debido a que existen evidencias que muestran precisamente que las condiciones del clima, ocasiona malestar entre las mascotas, principalmente en los perros, y si de temperaturas altas hablamos, pues aquí hasta las personas cambian de humor.
La temporada de calor se presta para que los animales anden más deambulando en el medio ambiente, caminando, paseando, pero que en su momento dado se van a topar con esta situación de que alguien dejo salir su perro de su casa, no le dan los cuidados y ataca a una persona y esto es lo que está sucediendo, y usted lo puede comprobar con solo echar un vistazo en los periódicos tradicionales o virtuales.
El tema de la rabia anteriormente era muy común escuchar que la rabia canina era provocada por el calor.
La población tenía la creencia, que precisamente esta enfermedad, que no solamente les da a los perros, estaba asociada con las altas temperaturas, lo cual no es así.
Especialistas han dado a conocer, que la rabia no nace del calor ni de la falta de agua, sino que es provocada por un virus, el cual vive dentro del animal, se mantiene de él, sin que el calor sea determinantemente para que este crezca; ¡es más!, el virus ni siquiera puede sobrevivir en el ambiente.
Por la temporada de calor, prácticamente la rabia no influye en esta época, porque estemos en calor o en frío para la rabia es lo mismo, porque no se genera a través de ese factor que son las altas temperaturas, es una enfermedad causada por un virus, que para que se mantenga tienen que estar permaneciendo en un ser vivo.
La rabia se encuentra presente en la saliva de los animales infectados y por eso trasmite con las mordidas o cuando lamen la piel, es decir cuando hay contacto directo.
Los cuidados para el calor son al igual que una persona, se debe poner especial atención a los animales, que por el calor pueden desarrollar enfermedades, como la rabia, que no es principalmente originada por esta causa, pero si es un factor importante para su aparición.
La situación es que, si no les damos primeramente atención al animal, debemos tenerlo protegido del sol, de las altas temperaturas, porque a él le va a causar un problema, un shock de calor, una deshidratación, una convulsión, todo un cuadro clínico que si lo ve va a pensar que ese, pero tiene rabia.
El problema del perro es que lo tuvieron en la azotea, en pleno sol, sin una sombra, sin agua o en un patio amarrado, prácticamente esos animales van a tener un problema físico.
Es necesario que al igual que una persona, la mascota viva en condiciones de limpieza, a fin de evitar la aparición de futuras enfermedades, que pueden causar daño no solo al perro o al gato, sino a la gente que convive con el diariamente.
Si a nuestros hijos les ponemos a su vida suero oral, además les damos medicamento para problemas gastrointestinales. También debemos hacer lo mismo con nuestras mascotas.
Así que para los dueños de esas mascotas no se porten como un verdadero animal y trátenlos como un miembro más de la familia. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org