Habitantes que se oponen a la construcción de la Línea 7 del Metrobús sobre Paseo de la Reforma alistan un nuevo amparo contra este proyecto, por considerar que los autobuses que circularán por esa vía afectarán la imagen de la ciudad y generarán más contaminación.
De acuerdo con Víctor Juárez, representante de los vecinos inconformes, las unidades de doble piso ya no pueden circular en Europa y no están autorizados para transitar en Canadá ni Estados Unidos.
A su vez, Ramón Ojeda Mestre, de la Academia de Derecho Ambiental, cuestionó que los autobuses adquiridos no sean eléctricos, sino que utilicen combustibles fósiles, con lo que no se contribuirá a la disminución de emisiones contaminantes.
Además de que supuestamente las unidades no están hechas para transitar a dos mil 240 metros sobre el nivel del mar, que es a la altura a la que se encuentra la Ciudad de México.