México, 15 ago (PL) Por su dependencia comercial de Estados Unidos, México no tendrá capacidad para imponer términos en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), asegura hoy Arturo Huerta, experto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La delegación mexicana tampoco podrá incidir en temas fundamentales, pues el país carece de una política industrial, mientras norteamérica va a defender sus productos y aumentar sus exportaciones, advirtió Huerta.
En un encuentro con la prensa comentó que en la primera mesa del Tlcan, que se iniciará mañana, el gobierno de Donald Trump tratará de imponer sus criterios para aumentar su competitividad y crecimiento.
A Estados Unidos le interesa imponer concesiones a su favor sin dar nada a cambio y menos si se trata de algo que afecte su desarrollo industrial y genere de empleo, subrayó.
Consideró que sería un error ceder en el área industrial a cambio de obtener algún supuesto beneficio para el sector agrícola, porque sería seguir condenándonos al subdesarrollo.
Por su parte, los senadores Marcela Guerra y José Ascención avizoran un panorama distinto y estiman que se puede competir en condiciones de equidad, aun cuando reconocen que se requiere de apoyo gubernamental para rivalizar a escala internacional.
Mientras, organizaciones campesinas, sociales y sindicatos criticaron al gobierno por el hermetismo mantenido con la estrategia que seguirá y califican de antidemocrática la exclusión de representantes de los pequeños productores en la delegación negociadora.
Dirigentes obreros estiman que a la actual administración solo le interesa conocer la opinión de los grandes empresarios, negando la participación ciudadana.