Como en los viejos tiempos Christian Giménez se vistió de héroe; Chaco saltó de la banca al minuto 45, y no solo le cambió el rostro a la Máquina, sino también se encargó de marcar el gol con el que el equipo cementero se impuso 2-1 a Santos, para romper racha de tres empates consecutivos y mantener el invicto en el Apertura 2017.
Al medio tiempo las cosas no pintaban nada bien para la escuadra dirigida por Paco Jémez, que perdía desde el minuto 11, gracias a un gol de Julio Furch que mandó adelante a los visitantes, que hasta ese momento mantuvieron a raya a la ofensiva local, la cual lució inoperante y por muchos momentos frustrada de no poder pasar a la zaga de Torreón.
Pero la parte complementaria cambió, en gran parte por la entrada de Giménez, quien rápido se echó el equipo a la espalda. No habían pasado ni cinco minutos del silbatazo, cuando Felipe Mora se encontró una pelota suelta dentro del área y con un remate de derecha la mandó a guardar para igualar el marcador.
Las cosas se le facilitaron más a Cruz Azul cuando al 55’, Jorge Sánchez fue expulsado por doble amarilla. Entonces la Máquina se fue con todo al ataque en busca del tanto de la victoria.
Y aunque le costó trabajo abrir a un equipo que se encerró desde el primer minuto, con un hombre de más, Omar Mendoza mandó un centro templado al centro del área, al lugar exacto donde apareció solo el Chaco, quien de primera intención y con derecha, remató el esférico para poner el 2-1 y provocar la locura en el Estadio Azul.
Santos sufrió la expulsión de Walter Sandoval y Julio Furch, situación que le puso aún más fáciles las cosas a los celestes, que pudieron meter al menos tres goles más, pero que no supieron definir las jugadas que generaron en los minutos finales del encuentro.
Cruz Azul llegó a 14 unidades en el torneo luego de sumar su tercera victoria, victoria que le podría servir como impulso para enfrentar el próximo martes al América en el Estadio Azteca, por un lugar de los ocho a los curtos de final de la Copa MX.
Fuente: NoventaMinutos