Ottawa, 21 sep (PL) Aunque la provincia canadiense de Columbia Británica implementa un sistema de monitoreo y alerta temprana de terremotos, la educación ciudadana para mitigar daños sigue siendo hoy un elemento primordial, afirman especialistas.
El gobierno del occidental territorio encargó a la Universidad de Victoria que desarrolle una red de sensores para detectar la primera onda que precede a un sismo y sea capaz de disparar una pre-alarma.
El sistema debe estar terminado antes del 1 de abril de 2019, indicó Radio Canadá Internacional.
De esta forma, los ciudadanos podrían conocer la amenaza con un lapso de 10 a 30 segundos previos al temblor.
Puede que no suene como mucho, pero es suficiente para que los servicios de emergencia se preparen, para eliminar algunas fuentes de peligro a su alrededor o para refugiarse, sostienen integrantes de la organización Ocean Networks Canada.
El suroeste de Columbia Británica está asentado en una falla sísmica importante, la de Cascadia, señaló Benoît Pirenne, director de Contratación de Usuarios de la entidad.
Explicó que esta falla, localizada al oeste de la Isla de Vancouver y de la ciudad estadounidense de Seattle, causa un gran terremoto como promedio cada 300 a 500 años, y que el último tuvo lugar en enero de 1700.
Para Pirenne, lo esencial es no alarmarse, sino estar listo, pues «sea cual sea la magnitud de los terremotos, los sistemas de alerta deben estar en su lugar y la gente debe saber qué hacer».
Mientras tanto, autoridades invitaron a ciudadanos de la provincia a participar el 19 de octubre, a las 10:19 hora local, en el ejercicio ShakeOutBC, cuando ocurrirá un simulacro con el objetivo de preparar a las personas y entidades en caso de un fuerte movimiento telúrico.