Washington, 2 oct (PL) Investigadores de la universidad estadounidense de Chicago informaron en un estudio publicado hoy que las pruebas para detectar la pérdida de la capacidad olfatoria podrían ser útiles para identificar precozmente el riesgo de demencia en mayores.
Como parte de la pesquisa, siguieron durante cinco años la evolución de cerca de tres mil mujeres y varones con edades comprendidas entre los 57 y 85 años que fueron sometidos a una prueba para evaluar la capacidad olfativa denominada Sniffin Sticks.
Sniffin Sticks, es un examen en el que se emplea una pluma cargada no con tinta, sino con distintos olores. En este caso con: olor a menta, pescado, naranja, rosa y cuero.
Como resultado, el 80 por ciento identificó correctamente al menos cuatro de los cinco; un 14 reconoció tres; un cinco solo dos; y un dos únicamente uno, señalaron los autores en el trabajo divulgado en la revista Journal of the American Geriatrics Society.
Al decir del líder del estudio, Jayant Pinto, nuestros resultados muestran que el sentido del olfato se encuentra estrechamente conectado con la función cerebral y la salud.
Creemos que la capacidad olfatoria específica, así como la funcionalidad sensorial en su conjunto, pueden ser un importante signo precoz de la demencia y pueden ayudar a identificar a los pacientes con mayor riesgo de padecerla, añadió.
Por su parte, la coautora Martha McClintock considera que el sistema olfativo también cuenta con células madre que se autorregeneran, por lo que el descenso en la capacidad para oler podría ser una señal de una pérdida en la capacidad cerebral para reconstruir algunos componentes clave que se están deteriorando con la edad.
En tal sentido, nuestro test requiere una mayor atención. Aún queda mucho por hacer para convertirlo en una prueba clínica, pero podría ayudar a identificar a la población en riesgo, concluyó Pinto.