Atenas, 12 nov (PL) Croacia selló hoy su clasificación a la Copa del Mundo de fútbol de Rusia-2018, al empatar 0-0 contra Grecia y hacer valer el triunfo por 4-1 del partido de ida de esta eliminatoria de repechaje europeo.
Los croatas, liderados por Luka Modric (Real Madrid) e Ivan Rakitic (Barcelona), cedieron el balón a sus oponentes en la mayor parte del partido para jugar al contragolpe, pero finalmente el marcador permaneció sin goles.
En realidad, el partido fue un trámite para los dirigidos por Zlatko Dalic, quienes, confiados en la amplia ventaja global 4-1, jugaron sin presión alguna hasta consumar el añorado pasaporte a Rusia.
Con el empate los croatas aseguraron su presencia en la cita mundialista por quinta vez desde su separación de la antigua Yugoslavia, en 1991.
Croacia debió asistir a la ronda de repesca tras quedar ubicada en el segundo lugar del grupo I, en las eliminatorias de Europa, por detrás del sorprendente equipo de Islandia, que avanzó al Mundial por primera ocasión en la historia.
Horas antes, Suiza también había empatado hoy por 0-0 ante Irlanda del Norte y logrado acceder al Mundial, amparada en su victoria por 1-0 en el duelo de ida de esa eliminatoria.
Los helvéticos montaron un fortín en el estadio San Jacob de esta ciudad y dejaron sin opciones a sus adversarios, que, desfallecidos, vieron como se les escapó el sueño de asistir a la cita del orbe por primera vez desde 1986.
Suiza debió realizar este repechaje tras quedar por detrás de Portugal en el grupo B de las eliminatorias de Europa.
Tras conseguir el boleto, vía repesca, Suiza aseguró su cuarta incursión consecutiva en mundiales de balompié y la oncena de la historia.
Mañana continuarán los partidos de vuelta de las eliminatorias de Europa con el duelo Italia-Suecia, en casa de los primeros.
En el choque de ida, los suecos superaron contra todos los pronósticos por 1-0 a los italianos, tetracampeones del mundo, y los pusieron contra la pared.
Curiosamente, la última vez que Italia quedó fuera de una cita mundialista fue en 1958, cuando Suecia acogió el certamen.
Un día más tarde, el martes, Dinamarca e Irlanda dirimirán el último pasaje por el continente europeo a Rusia-2018. El desafío de ida, en suelo danés, quedó saldado con empate sin goles.