Los demócratas, por su parte, votaron en bloque en contra de la legislación
Washington, 2 dic (PL) Los republicanos del Senado estadounidense aprobaron hoy el promovido proyecto de reforma fiscal que rebajará impuestos a individuos y empresas, lo cual pone al presidente Donald Trump a las puertas de alcanzar su primera gran victoria legislativa.
Con apretado margen de 51 votos a favor y 49 en contra, la Cámara alta dio luz verde esta madrugada a su versión de la iniciativa, luego de que la baja hiciera lo mismo con su propia propuesta hace dos semanas, y ahora ambos órganos deberán llegar a un diseño final que será enviado al mandatario para su ratificación.
Tras varios días de intensas negociaciones, que obligaron al liderazgo del partido a cambiar elementos para ganar el apoyo de algunos detractores del texto inicial, los republicanos del Senado consiguieron el éxito que no alcanzaron en sus continuos intentos de revocar el Obamacare.
El único miembro del partido rojo que rechazó la iniciativa fue Bob Corker (Tennessee), quien durante todo el proceso de negociaciones manifestó que se opondría a la medida si provocaba aumentos del déficit.
‘Yo quería llegar al sí. Pero al final del día, no puedo dejar de lado mis preocupaciones fiscales y votar por una legislación que creo, basada en la información que tengo actualmente, podría profundizar la carga de la deuda en las generaciones futuras’, indicó en un comunicado antes del sufragio.
Aunque el concepto de la reforma fiscal parece muy atractivo, por sus reducciones de impuestos a personas y compañías, el tema del déficit es una preocupación de diversos sectores y grupos, pues se prevé que aumente 1,4 billones (millones de millones) de dólares en una década.
Frente a ese tipo de críticas, los defensores de la propuesta sostienen que la pérdida de ingresos por esa vía se verá compensada con el crecimiento de la economía, pero diversos análisis sobre el tema contradicen tal previsión.
Un informe publicado el jueves por el no partidista Comité Conjunto sobre Tributación creó gran revuelo al señalar que la legislación solo provocará un incremento del de 0,8 por ciento del Producto Interno Bruto en los próximos 10 años, una pequeña fracción de lo promovido por los republicanos.
Eso significa que solo se recuperarán por esa vía 400 mil millones de dólares, lo cual aún deja un déficit de un billón de dólares.
Los demócratas, por su parte, votaron en bloque en contra de la legislación, porque sostienen que beneficia fundamentalmente a las personas de altos ingresos, contrario al argumento de Trump y los republicanos de que la más favorecida sería la clase media.
Además, temen que el incremento de la deuda lleve a la contracción de servicios sociales como el programa sanitario Medicare.
Los senadores del partido azul intentaron de modo infructuoso frenar el largo proceso de debates y votaciones iniciado el viernes y posponerlo hasta el lunes, pues criticaron que solo recibieron el proyecto de casi 500 páginas pocas horas antes de someterlo a sufragio, incluso con anotaciones manuscritas al margen y partes tachadas.
Con el resultado de hoy en el Senado, el presidente norteamericano se coloca a un paso de conseguir un éxito importante en un primer año de mandato marcado por varias derrotas dentro y fuera del Congreso, las continuas polémicas y la sombra constante de la investigación sobre los comicios de 2016.