Naciones Unidas, 26 dic (PL) El representante regional de América del Sur del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), Amerigo Incalcaterra, lamentó hoy la decisión del presidente peruano Pedro Pablo Kuczynsk de indultar al exmandatario Alberto Fujimori.
La sentencia contra Fujimori «marcó un hito histórico para Perú y la región latinoamericana en la lucha contra la impunidad por crímenes graves contra los derechos humanos», recordó.
A juicio de Incalcaterra, con el indulto se pierde de vista a las víctimas y sus familias, cuando ambas resultan un elemento fundamental en el proceso hacia la reconciliación.
«No poner la situación de las víctimas en el centro de esas decisiones socava los avances realizados por el Estado peruano en términos de verdad, justicia, memoria y reparación.»
Las decisiones de las autoridades deben respetar la obligación del Estado de investigar, procesar y sancionar las violaciones de derechos humanos, con el fin de evitar cualquier situación que pueda conducir a la impunidad, recalcó el representante de la Acnudh.
En ese sentido, añadió, necesitan tomar en consideración el impacto de sus decisiones sobre las familias y las víctimas, quienes luego de varias décadas aún sufren las consecuencias de los crímenes.
La concesión de indultos es una prerrogativa que requiere un análisis riguroso en cada caso, teniendo en cuenta la gravedad de los hechos y en el marco de un proceso transparente e inclusivo, conforme a los estándares internacionales, apuntó.
El indulto al expresidente Alberto Fujimori ha levantado una ola de protestas en Perú y también de funcionarios gubernamentales, mientras aumentan los cuestionamientos jurídicos sobre su legalidad.
Fujimori fue condenado en 2009 a 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad y corrupción como la autoría mediata de dos matanzas, con 25 civiles inermes asesinados.