Nunca la persona llega a tal grado de perfección como cuando llena un impreso de solicitud de trabajo
Anónimo
A finales del presente mes, la XV Legislatura de Quintana Roo designará al nuevo titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHQR), en un proceso que inició muy cuestionado por la intención de algunos diputados de “cerrar la puerta” a ciertos aspirantes, pero si a eso se suman los recientes cuestionamientos en la integración de diversos órganos de la administración pública, cuyos titulares fueron impuestos aun sin contar con los requisitos legales para ello, toda la atención, por lo menos de lo medios de comunicación, estará puesta en el proceso para la designación del ombudsman.
Todo ocurrió en diciembre del año recién concluido, la diputada presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la XV Legislatura, Eugenia Solís Salazar, presentó un proyecto para “ciudadanizar” la designación en la titularidad de la Comisión estatal, dado que Harley Sosa Guillén termina su encargo ahora en enero de 2018, la idea central fue abrir la posibilidad de que organizaciones civiles postulen aspirantes, pero “escondidito” entre los requisitos se incluyó incrementar la edad para contender, de 30 a 35 años; ante lo cual surgió inmediatamente el rumor de que la legisladora pretende con ello allanarle el camino a funcionarios como el segundo visitador de la CEDHQR, Luis Fernando Medina; y al coordinador de Visitadurías de la zona norte, Marco Euán.
Sin embargo, luego de los cuestionamientos públicos –y según trascendió, el “regaño” desde las “alturas”-, la Legislatura dio marcha atrás y la convocatoria fue emitida en términos diferentes y el periodo de inscripciones vence el 12 de enero. Si el proceso de designación se cuida, por primera vez pudiera haber sorpresas positivas, pues se quedarían en el camino los contendientes “impulsados” por la diputada Solís, y emergerían nombres interesantes, como el de Claudette González Arellano o Eduardo Ovando Rivera. La selección misma del nuevo titular será indicativo de la visión gubernamental con respecto a los órganos autónomos estatales. Continuismo o renovación, porque hasta ahora mucho “cambio” no se observa.
COMENTARIO MORBOSO
En las redes sociales del escribiente, un comentario –sin confirmar, aclarado desde el inicio- de que Raymundo King de la Rosa renunciaba al cargo que ostenta –aunque no ejerza-, generó un revuelo tal que obligó al aun dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a hacer la aclaración de que no se iba; sin embargo, algunos “enterados” aseveraron que fue la más dolorosa que pudo haber hecho, pues el quedarse en la dirigencia implica que no tendrá ninguna candidatura a cargos de elección en el proceso federal en marcha. No habrá “salida digna”, hasta que se marche al olvido; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra, nos leemos en la próxima.