Estados Unidos “se está dando un balazo en el pie” al imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio que hace de México, Canadá y los países de la Unión Europea, admitió el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, en una entrevista radiofónica.
Este jueves 31 de mayo “es un triste día para el comercio internacional”, dijo, pero México tuvo que responder de manera contundente a esta acción “totalmente ofensiva” del gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. “No podíamos quedarnos cruzados de brazos” y “pues más vale una colorada que 10 descoloridas”, comentó.
El funcionario sostuvo que “resulta totalmente incomprensible e ilógico” imponer aranceles al acero y aluminio de México porque “compramos más a Estados Unidos que lo que le vendemos”, además de que es un sector muy integrado en América del Norte.
¿Se está pegando Estados Unidos un balazo en el pie?, cuestionó el conductor.
Sin duda, porque están afectando un sector que está totalmente integrado… Las mismas empresas de la industria acerera existen en México y Estados Unidos
Justificó que no se impondrán aranceles a todos los productos de acero que México importa de Estados Unidos, sino fundamentalmente sólo a tres, para “no cometer el error de afectar nuestra competitividad en la integración de la industria internacional”.
Para compensar la afectación que los aranceles estadunidenses ocasionarán a la industria nacional, “no sólo tuvimos que tomar acciones inmediatas contra el acero (estadunidense) sino también contra algunos productos de otros sectores”, entre ellos la carne de cerdo, quesos, manzanas, uvas y arándanos que se importan de ese país.
Tales productos fueron seleccionados a partir de la expansión que tienen entre los consumidores pero sin que tengan “un impacto importante” en el consumo nacional ni en la inflación pero tampoco en la competitividad de la industria, además de que se cuente con opciones y fuentes alternativas de abastecimiento, explicó.
Además, son productos que “tienen implicaciones en ciertas regiones de Estados Unidos, cuya población y legisladores tienen voz y voto en el Congreso de ese país”.
¿Es un dardo político?
Así es. De alguna manera es mandar el mensaje claro de que este tipo de cosas no benefician a nadie, nos afectan a todos, puntualizó Guajardo.
“Claramente algunos de ellos son productos importantes, no tanto por su volumen o valor, sino porque políticamente son sensibles. Están en áreas donde hay legisladores, senadores y diputados importantes que han estado (advirtiendo) a la administración del señor Trump que tenga mucho cuidado con acciones de esta naturaleza, poco fundamentadas en las reglas del comercio internacional y también sirven para activar claramente a gente que está interesada en seguir promoviendo el comercio y el respeto a las reglas del juego”, abundó en otra entrevista, ésta por televisión.
El secretario remarcó que son medidas temporales y el diálogo no se interrumpe, pero reconoció que “sí se tensan las discusiones, pero en esta profesión estamos y hay que seguir poniendo la cara para la disposición al diálogo y a encontrar soluciones a estos problemas”.
Sobre la afectación que éstas decisiones tendrán en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), aseguró que las pláticas continuarán y “no se enfrían”.
Si bien insistió que “nadie gana” con los aranceles, comentó que durante mucho tiempo México mandó el mensaje de que no los aceptaría. Todavía este miércoles y jueves Guajardo se reunió con el secretario de Comercio y el representante comercial de Estados Unidos, Wilbur Ross, y Robert Lighthizer, respectivamente, en París, Francia, durante la minireunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
“Ayer me dormí con Wilbur Ross, ahora me dormí con Lighthizer, cuando confirmaron que la medida venía en este sentido… La decisión ya estaba tomada y sólo respondieron ‘no se preocupen, a lo mejor va a ser corto, porque vamos a seguir dialogando’”, indicó. Es “una contradicción”, fustigó, que Estados Unidos muestre “una posición intransigente” contra el multilateralismo en la reunión ministerial de la OMC.