La Comisión para la Reconstrucción debe desaparecer, aseguró el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, quien opinó que el gobierno de José Ramón Amieva comete una grave falta en contra de los damnificados, al incurrir en omisión para ayudarlos, porque los recursos económicos existen.
Propuso la creación de un fondo similar al Fondo de Desastres Naturales (Fonden), exclusivo para la Ciudad de México, en virtud de que actualmente, por concentrar una importante actividad económica, no puede acceder al ya existente.
Explicó que con el fideicomiso para la capital se podría invertir en un seguro transversal, donde se financien los diagnósticos tras el sismo, para la demolición de edificios, que existan recursos para la renovación y reconstrucción.
En este sentido, Arriola Peñalosa consideró que “hay facultades para generar decretos, para resolver el tema jurídico de la aplicación de los recursos. Lo que hubo fue una profunda incapacidad que se sigue sosteniendo, porque no era necesaria la Ley de Reconstrucción, ni la Comisión. Era una tarea directa que tenía que haber encabezado el gobierno de la ciudad y no pudo”.
En entrevista al término de una reunión con 50 mujeres líderes, subrayó que “hay recursos públicos y no se ha hecho nada. Eso es lo que más preocupa” y agregó que si el actual jefe de Gobierno se comprometió a ejecutar dos mil millones de pesos a favor de la reconstrucción, debe transparentar esos recursos y detallar su destino.
El abanderado tricolor insistió en que para resolver la problemática de los damnificados no se requieren comisiones, terceras personas ni más burocracia, sino voluntad política y eficacia por parte de las autoridades para dar solución inmediata a las exigencias de la población afectada.
Finalmente, recordó que el sismo del pasado 19 de septiembre dejó un saldo de 28 mil damnificados y un fondo de 14 mil millones de pesos, “que no se ha ejercido en las labores de reconstrucción”, por lo que dijo que es evidente que el gobierno capitalino está totalmente rebasado.