Washington, 28 jun (PL) El tiroteo ocurrido hoy en un diario de la ciudad de Annapolis, Maryland, dejó el día más mortífero para el periodismo en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, indicaron medios locales.
Cuatro personas murieron cuando un hombre abrió fuego esta tarde con una escopeta en la oficina del periódico Capital Gazette, y una quinta falleció después de ser transportada al hospital, además de que otras dos resultaron heridas.
La policía del condado de Anne Arundel difundió los nombres de las víctimas mortales y confirmó que todas eran empleadas del Capital Gazette.
De acuerdo con la televisora CNN, la información sobre el tiroteo causó alarmas en las salas de redacción de todo el país, y las fuerzas del orden en varias ciudades intensificaron la seguridad alrededor de las principales organizaciones de noticias como medida de precaución.
Al decir de la cadena, las amenazas contra los miembros de los medios han ido en aumento en los últimos años, pero los homicidios son muy raros.
La última vez que varios periodistas fueron asesinados durante su misión en Estados Unidos fue en 2015, cuando un exempleado atacó a dos miembros de un equipo de noticias de WDBJ TV durante un informe en vivo en Virginia, recordó.
El portal digital Huffington Post señaló que ocho profesionales de la prensa fallecieron a causa de los atentados terroristas de 2001, entre ellos Bill Biggart, quien fue alcanzado por la caída de escombros mientras tomaba fotografías del colapso del World Trade Center.
Bill Krampf, subjefe de policía del condado de Anne Arundel, manifestó que el de este jueves fue un tiroteo dirigido contra el Capital Gazette, aunque las autoridades no tenían conocimiento de que el sospechoso estuviera apuntando a nadie en particular.
Esta persona estaba preparada para disparar a otros, su intención era causar daño, agregó sobre el autor del tiroteo, que se encuentra bajo custodia de la policía.
Las autoridades no han divulgado oficialmente el nombre del sospechoso, pero varias fuentes policiales lo identificaron como Jarrod Warren Ramos, quien presentó una demanda por difamación en 2012 contra el diario en un caso que fue desestimado.