Washington, 15 jul (PL) El presidente Donald Trump calificó de una desgracia para Estados Unidos el testimonio en su contra del agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI) Peter Strzok, durante una entrevista difundida hoy.
Aunque estoy en Europa, observé algunos de los testimonios de Strzok. Pensé que era una desgracia para nuestro país, una desgracia absoluta, dijo el mandatario a la televisora CBS News grabada durante su periplo por el llamado Viejo Continente.
Aseguró además que el agente quiso hacer cosas en su contra, incluso antes de resultar el candidato republicano en las elecciones de 2016, «y luego mintió al respecto».
El jueves, Strzok intervino en una audiencia que según distintos medios se convirtió en un rencoroso enfrentamiento partidista, tras negarse a responder preguntas como parte de la investigación especial del fiscal Robert Mueller sobre la presunta colusión de funcionarios rusos en los comicios de 2016, algo desmentido en varias ocasiones por Moscú.
El oficial participó en la pesquisa sobre el uso de un servidor privado de correo electrónico por parte de la excandidata presidencial demócrata Hillary Clinton, y estuvo en el inicio de la investigación de Mueller.
Pero Strzok fue excluido de este último caso tras revelarse que él y la abogada Lisa Page intercambiaron mensajes de texto muy críticos sobre Trump cuando era aspirante a la Casa Blanca.
En una comunicación con fecha 8 de agosto de 2016, Paige pregunta si Trump llegará a ser presidente, a lo que su interlocutor le respondió: «no, no lo conseguirá, lo detendremos».
Al comparecer ante dos comités de la Cámara de Representantes, el oficial del FBI explicó que tal comentario fue escrito en respuesta a un insulto lanzado por el actual mandatario contra la familia inmigrante de un héroe de guerra fallecido.
Mi presunción, basada en ese horrible y repugnante comportamiento, era que la población estadounidense no elegiría como presidente de Estados Unidos a alguien que demostrara esa conducta, dijo Strzok.
Agregó que de ninguna manera su mensaje fue una sugerencia de que él o el FBI tomarían alguna medida para impactar indebidamente el proceso electoral.
El oficial fue llamado a testificar sobre esa comunicación privada porque los republicanos y el propio presidente la han visto como una forma de sustentar sus denuncias de que existe sesgo político contra el gobernante dentro de la agencia federal.
Mientras tanto, la abogada Page se negó a cumplir con una citación de legisladores republicanos para que se presentara a una entrevista sobre el tema, y dos miembros de ese partido amenazaron con llevar a cabo un procedimiento de desacato en su contra.