Nacida en Memphis, Tennessee, un 25 de marzo de 1942, Aretha Franklin se inició en la música junto a sus hermanas Carolyn y Erma, cantando en la iglesia de Detroit que fundara su padre, C.L. Franklin. Es así que sus primeras grabaciones fueron interpretando música gospel. Este jueves por la mañana la noticia de su muerte se dio a conocer y fue confirmada por su representante Gwendolyn Quinn. La diva del soul falleció debido a un cáncer de páncreas.
Consagrada como una leyenda del soul y representante icónica de la era de oro de la música afroamericana, Franklin creció en un ambiente permeado por la música. Clara Ward, Mahalia Jackson eran amigas de la familia y huéspedes frecuentes en su casa. Pero su vida también se vio marcada por una maternidad prematura y un matrimonio violento. Cuando tenía diez años su madre murió, pero antes sus padres ya se habían separado y Aretha había permanecido a lado de su padre. A su lado, se presentó en diversos programas de gospel.
Su última presentación en solitario ocurrió en agosto del 2017, en Filadelfia. A los 14 años ya había grabado el álbum The Gospel Sound (1956) y a finales de los sesentas ya se había convertido en un icono de la comunidad afroamericana. Temas como “I Say a Little Prayer”, “Respect”, “Think”, “Son of a Preacher Man”, le dieron reconocimiento a nivel internacional. Canciones que marcaron una época no sólo en la música sino también en la historia afroamericana.