San Salvador, 18 oct (PL) Un centenar de emigrantes hondureños de camino a Estados Unidos permanecen hoy varados en la frontera de El Salvador, cuyas autoridades exigen la documentación necesaria para dejarlos pasar.
El punto fronterizo de El Amatillo, en La Unión, tuvo que ser reforzado por la Unidad del Mantenimiento y del Orden, la Policía Nacional Civil y la Fuerza Armada para evitar algún problema con los emigrantes.
Los recién llegados del vecino país alegan que el gobierno derechista de Juan Orlando Hernández generó una condición de inestabilidad que desató las caravanas de emigrantes, muchos de ellos indocumentados.
Por lo pronto, el gobierno de El Salvador confirmó que en El Amatillo se registró un flujo de hondureños que solicitaron su trámite, y la mayoría cumplía con los requisitos que establecen las leyes salvadoreñas.
Pero también llegaron otros sin su documentación en regla, lo cual les impedía ingresar en El Salvador, «sin menoscabo del debido respeto de los derechos humanos» de las personas provenientes de Honduras.
La Dirección de Emigración confirmó que las autoridades en la frontera siguieron los procedimientos normales que regulan el ingreso de personas al territorio nacional, sin discriminar si integran o no dicha caravana.
Herbert Hernández, director de Control Migratorio, negó que el estado salvadoreño generara algún tropiezo a la movilidad de los extranjeros que cumplieran con los requisitos para ingresar a esta nación centroamericana.
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