Washington, 13 nov (PL) Los incidentes de crímenes de odio reportados al Buró Federal de Investigaciones (FBI) en Estados Unidos aumentaron un 17 por ciento el año pasado, en comparación con 2016, según un informe publicado hoy por esa agencia.
El documento sostiene que los organismos de aplicación de la ley le notificaron siete mil 175 denuncias de incidentes de odio en 2017, frente a las seis mil 121 correspondientes a los 12 meses anteriores.
Más de la mitad de los delitos de odio, aproximadamente tres de cada cinco, estuvieron relacionados con la raza o etnia de una persona, mientras que aproximadamente uno de cada cinco se enfocaron en su religión.
En total, cuatro mil 131 incidentes fueron a causa de raza, etnia o ascendencia, y entre ellos dos mil 13 constituyeron ataques contra afronorteamericanos, 741 a personas blancas, 427 contra latinos y 251 contra nativos americanos.
Al mismo tiempo, mil 564 hechos se vincularon con motivos religiosos, con una gran mayoría de ellos, 938, dirigidos contra la población judía -un incremento de 37 por ciento-, y 273 contra musulmanes.
Mil 130 crímenes estuvieron relacionados con la orientación sexual, con 679 contra hombres y 126 contra mujeres homosexuales; mientras que también se registraron 106 incidentes contra personas transgénero.
De los más de siete mil incidentes de odio en 2017, unos cuatro mil fueron delitos contra personas, desde amenazas e intimidaciones hasta agresiones y asesinatos; y más de tres mil fueron crímenes contra la propiedad, desde vandalismo hasta robo e incendio.
Los nuevos datos del FBI se difunden menos de un mes después del peor ataque antisemita en la historia de los Estados Unidos, el tiroteo del 27 de octubre en una sinagoga de Pittsburgh, Pensilvania, donde murieron 11 personas y seis resultaron heridas.
El sospechoso en ese ataque ha sido acusado de decenas de crímenes de odio federales, y ese solo hecho representa casi la cantidad de asesinatos por delitos de odio registrados el año pasado en los Estados Unidos, 15.
Jonathan Greenblatt, director ejecutivo de la Liga Anti-Difamación, manifestó que este informe «proporciona evidencia adicional de que se debe hacer más para enfrentar el divisivo clima de odio en Estados Unidos».
«Eso comienza con líderes de todos los ámbitos de la vida y de todos los sectores de la sociedad que condenen enérgicamente el antisemitismo, el fanatismo y el odio cuando ocurran», apuntó.
Mediante un comunicado emitido este martes, el fiscal general interino del país, Matthew Whitaker, dijo que el reporte «es un llamado a la acción, y atenderemos ese llamado».
«La principal prioridad del Departamento de Justicia es reducir los delitos violentos en Estados Unidos, y los delitos de odio son violentos», añadió en el texto.