México, 24 feb (PL) El carismático y alegre cómico mexicano Germán Valdés (Tin Tan) regresó a la pantalla grande nacional con la recuperación de una de sus películas más emblemática, El Rey del Barrio, se anunció hoy.
La Cinemateca Nacional anunció la restauración de primera calidad y con técnicas novedosa del filme estrenado en 1949, uno de los de mayor éxito de taquilla del cine mexicano y probablemente la más ícona de Tin Tan.
Por el momento, El Rey del Barrio es reestrenada en los cines a partir de este domingo, y no se ha dicho si habrá autorización más adelante para que exhiba también en la pantalla chica.
La restauración fue posible gracias a la colaboración de Arte y Cultura Grupo Salinas y la Cineteca Nacional.
Sergio Vela, su director, afirma que la perdurabilidad de este filme se encuentra en elementos como «el ingenio del personaje popular, la bonhomía, la generosidad, la sangre ligera y, al mismo tiempo, en el contraste por el sufrimiento.
La versatilidad de Tin Tan radica en ser un comediante formidable, que además «cantaba y bailaba muy bien; tenía una simpatía natural que hace que haya una especie de identificación de amplios sectores de la sociedad, lo que lo convierte en una figura emblemática, representativa y consecuentemente recurrente», explica Vela.
El Rey del Barrio, cinta dirigida por Gilberto Martínez Solares, fue filmada en nitrato de plata ※explica Sergio Vela※ lo que permitió hacer uso de la tecnología del Laboratorio de Restauración de la Cineteca Nacional para tomar los materiales originales y recuperar una imagen nítida de la cinta.
«Lo que se logró con esta restauración digital es prácticamente ver la primer copia de 1949 con toda la limpieza de los cuadros», asegura.
«Germán Valdés, Tin Tan, es una figura icónica con la que buena parte de los sectores populares urbanos se sienten identificados. Su aparición como gran pachuco corresponde a un momento en que la sociedad mexicana empieza a transitar de lo rural a lo urbano y mantiene una serie de raíces populares justamente en el entorno de la vida en una ciudad».
Tin Tan se convierte en una especie de retrato del varón mexicano, joven, urbano, con sus debilidades emocionales y, al mismo tiempo, con su gran ingenio, que resalta en buena medida la solidaridad de grupo, rasgo que afortunadamente la sociedad mexicana sigue teniendo, opina el experto.