México, 1 may (Prensa Latina) Decenas de miles de trabajadores desbordaron el Zócalo capitalino con marchas que convergieron en esa amplia explanada desde los cuatro puntos cardinales procedentes desde numerosos puntos de concentración de la ciudad.
De esa manera este Día del Trabajo como le dicen aquí al día mundial de los trabajadores del 1 de Mayo, es uno de los más concurridos de los últimos años y en las calles marcharon en cuadro apretado representantes de una gran cantidad de confederaciones, sindicatos y gremios que expresan por sí mismos la riqueza del movimiento obrero mexicano.
En un país de más de 120 millones de habitantes y una gran masa laboral, no existe una central única de trabajadores, sino que el movimiento obrero está muy sectorizado aunque hay un esfuerzo para restarle ampulosidad con la formación en curso de al menos tres confederaciones globalizadoras, que agrupan cada una a decenas e incluso cientos de sindicatos menores.
Son los casos de la Confederación Internacional del Trabajo, la Nueva Central de Trabajadores y la Confederación de Trabajadores Mexicanos, que mantienen una relación en desarrollo a nivel de sus dirigencias nacionales.
Lo interesante de esa situación es que las tres entidades coinciden en apoyar al Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, aprueban los principales objetivos de su IV Transformación de la vida social mexicana, y se pronunciaron a favor de la reforma laboral oficializada este 1 de mayo por el mandatario precisamente en homenaje al Día del Trabajo.
Dicha reforma acaba con lo que en México se le denomina despectivamente el charrismo sindical, consistente en una mafia explotadora, abusiva y violenta que imponía a «líderes», prohibía la elección democrática de dirigentes, cobraba cuotas ilegales a los afiliados a la fuerza y controlaba las plazas de trabajo. Ahora se establece por ley el voto secreto directo y obligatorio en la elección de dirigentes.
En las marchas de hoy, aunque cada sindicato planteó sus exigencias muy específicas y particulares al Gobierno, en su mayor parte demandas que están siendo procesadas desde hace algún tiempo como las de los profesores de la Universidad Metropolitana, el apoyo al Gobierno es mayoritario.
Incluso en algunas agrupaciones hay inconformidades aisladas con la forma en que, según sus dirigentes, fue aprobada la reforma laboral, pues no se consultó de forma total al movimiento sindical sino que el debate transcurrió básicamente en ambas cámaras del Congreso, aunque están plenamente de acuerdo en que con esa decisión habrá en México por vez primera democracia sindical.
Manifestaciones en Francia:
Se manifiestan miles de franceses en Día de los Trabajadores