Aumentó a 137 el número de víctimas mortales tras la explosión en una toma clandestina de un ducto de Pemex, de Tlahuelilpan, Hidalgo, el pasado 18 de enero.
Autoridades estatales reportan que la cifra incrementó, por la identificación de los restos de una persona y la muerte de uno de los lesionados que permanecía hospitalizado.
En tanto, cuatro aún se encuentran hospitalizadas.