El expresionismo fue un movimiento artístico de vanguardia alemán, que se desarrollo a partir de 1905, hasta 1915, hablando particularmente del grupo de artistas que conformaron El Puente (Die Brücke). El puente se formo en la ciudad de Dresde, integrado por los artistas: Ernst Ludwig Kirchner, Erich Heckel, Max Pechstein, Karl Schmidt-Rottluff y Emil Nolde.
De manera similar a lo que sucedió con la mayoría de las vanguardias artísticas, el Expresionismo buscaba romper con la tradición artística anterior, particularmente con el naturalismo (representación «realista» de las cosas, que fue la tendencia en el arte neoclásico). Los expresionistas vuelven la mirada al arte medieval gótico y románico, unido al primitivismo africano, corrientes artísticas de corte simbolista y antinatural.
En términos técnicos, la pintura expresionista sólo es comparable a el Fauvismo francés, pues comparten elementos como el uso subjetivo del color; la ruptura entre la obra pictórica y la naturaleza; el uso de colores vivos y la exageración de las formas. Pero hay un elemento esencial que distingue al Expresionismo del Fauvismo,y es el fuerte contenido crítico de las obras expresionistas.
Les Fauves, estaban más interesados en la exploración del color como elemento formal, y no así en el contenido intelectual de sus obras. Los expresionistas por su parte querían representar una visión subjetiva de la realidad, una realidad alemana que ellos percibían como decadente y fatal. Buscaban romper la máscara de la civilización moderna, mostrar lo que hay al fondo de su aparente racionalidad dominante; revelar las pasiones, angustias y delirios que luchan en el fondo del alma humana.