Ante el poco interés que ven algunos maestros sobre los libros por parte de los estudiantes que asisten a la fiesta de los intelectuales en Guadalajara, docentes piden a padres de familia ayuda para fomentar la lectura, explica el profesor de la escuela secundaria número 8 de Celaya, Guanajuato, Javier Linares:
“Resulta que los padres de familia no tienen ni libros, entonces es una labor que no cumplen los padres de familia, nos las cargan a nosotros los docentes”.
Con 43 estudiantes y tres profesores es como la escuela secundaria número ocho de Celaya, Guanajuato se une a la fiesta lectora.
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