El impulsor de este emprendimiento fue José Manuel Moller estudiaba Ingeniería Comercial en la Universidad Católica, se fue a vivir a una población en la comuna de La Granja junto a tres amigos. Como estudiaban y trabajaban tenían bajos ingresos, lo cual los obligaba a comprar lo necesario para el día a día en pequeños formatos. José Manuel, el encargado en aquella época de realizar las compras para la casa, se dio cuenta que, al comprar en el almacén de su barrio, terminaba pagando mucho más que si hubiera comprado los productos de mayor tamaño
Buscando una solución frente a esta situación, José Manuel funda Algramo. La idea original era crear una máquina que dispensara a granel la cantidad que el cliente quisiera comprar, para poder pagar un precio al por mayor por una pequeña cantidad. Estas máquinas se instalarían en los almacenes, ya que es en estos lugares donde se presenta el problema con mayor frecuencia.
Algramo, es una empresa chilena nacida a mediados de 2013, notó que los productos que se venden en envases pequeños. Así, Algramo quiere encaminarse por la vía conocida como del triple impacto: económico, sustentable y social.
Busca ser la plataforma sustentable preferida por los almacenes y sus vecinos.
Creen en la importancia de los almacenes y en la vida de barrio que se forma en torno a ellos. Juntos combatiremos el Impuesto a la pobreza que responde al modelo tradicional de negocio, donde las largas cadenas de distribución tradicional castigan económicamente a millones de familias en el mundo por comprar en pequeños formatos. Rechazamos el impuesto adicional al valor de la compra de alimentos de necesidad básica. Somos los que luchan por la igualdad y la justicia social, nos motiva el precio justo y que todos podamos acceder a él.
Cuentan con la certificación de empresa BCorp, quienes otorgan valor a empresas que buscan resolver problemas sociales y medioambientales, haciéndonos cargo de un problema global con una solución de triple impacto.
Negocio rentable para los almaceneros beneficiados con márgenes atractivos. Además, pueden competir con grandes cadenas de supermercados.
Social.
Las familias pueden ahorrar en torno a 40% en compras de productos de necesidad básica.
Sustentable.
La reutilización del envase evita 2 kilos de basura al mes por familia. Además, contribuye a la reducción de la huella de carbono.
Este tipo de emprendimientos se vuelven puntos clave para la sociedad ya que rompen paradigmas sociales y tiene un modelo de servicio al gramo a gano muchos premios por su innovación social y sigue comercializando sus productos