Brasilia, 11 mar (Prensa Latina) El Gobierno de Brasil redujo de 2,4 a 2,1 por ciento la proyección de crecimiento del Producto Bruto Interno (PIB) para el 2020 por el impacto causado por la Covid-19.
Según la Secretaría de Política Económica (SPE), dependiente del Ministerio de Economía, existe incertidumbre por la caída de los precios del petróleo y la desaceleración del crecimiento global que inciden en la economía brasileña.
En una nota precisa que «el escenario de crecimiento para este año se ha vuelto más desafiante. Estamos monitorizando de cerca el desarrollo del Covid-19 y la reciente caída de los precios del petróleo y reafirmamos que la mejor respuesta al nuevo escenario es perseverar con las reformas fiscales y estructurales».
La SPE insiste en que los impactos del nuevo coronavirus en la economía nacional para este año se sitúan en torno al 0,3 por ciento del PIB.
Algunos de los efectos de la enfermedad serán una reducción de la productividad por las «quiebras en la cadena de producción y posibles limitaciones promovidas por la enfermedad en el trabajo», agrega el ente.
Detalla como posibles consecuencias la reducción de la demanda, efectos sobre los valores de algunos productos primarios, las condiciones financieras o el límite en el crédito.
La secretaría recalcó que, por un lado, una caída en el importe del petróleo puede interpretarse como impacto positivo, dada la reducción en el coste de los insumos de producción.
Con la actualización, la estimación del Gobierno se acercó, pero aun así fue superior a la expansión del 1,99 por ciento esperada por los especialistas para la economía de este año, según el último boletín Focus, del Banco Central.
Para el primer trimestre, el equipo económico proyectó un aumento del 0,20 por ciento del PIB en los tres meses anteriores, con un ajuste estacional, y del 1,84 en comparación con el mismo período en 2019, al señalar que los datos ya incorporan los efectos adversos del coronavirus en los precios de los activos.