Londres, 15 mar (Prensa Latina) El gobierno británico anunció hoy que aconsejará el autoaislamiento de ancianos, para evitar el contagio con el nuevo coronavirus COVID-19, en medio de críticas por su demora en aplicar medidas de distanciamiento social más drásticas.
Según explicó el ministro de Salud Pública del Reino Unido, Matt Hancock, en declaraciones por separado este domingo a las cadenas Sky News y BBC, la solicitud de autoaislamiento estará dirigida a las personas mayores de 70 años, por ser el sector poblacional más vulnerable a la enfermedad.
Las medidas que estamos analizando tomar son muy, muy importantes, y alterarán la forma de vida de casi todos en el país, apuntó el funcionario, quien dijo que los ancianos tendrían que permanecer aislados durante semanas, o quizás meses.
Hancock también confirmó que el gobierno presentará esta semana una legislación de emergencia que estaría lista el jueves, que otorgaría poderes especiales a la Policía y a los servicios de Inmigración, y permitiría además ordenar la cancelación de eventos públicos donde participen más de 500 personas.
El anuncio de Hancock coincide, sin embargo, con una avalancha de críticas vertidas por amplios sectores de la población, por considerar que el Ejecutivo liderado por el primer ministro Boris Johnson no está actuando de manera drástica para enfrentar el brote de COVID-19, pese a que el Reino Unido registra ya 21 muertes y mil 140 casos.
Más de 200 científicos británicos enviaron, por ejemplo, una carta abierta a las autoridades donde las exhortan a tomar medidas que vayan más allá de las actuales, que se limitan a aconsejar el autoaislamiento de las personas con tos y fiebre, cancelar los viajes escolares al extranjero y lavarse continuamente las manos.
De acuerdo con los especialistas, la implementación de medidas de distanciamiento social más fuertes como las tomadas por otros países europeos, ayudaría a reducir de forma dramática la propagación del virus, y salvaría miles de vidas.
Los científicos también difieren de la opinión del principal asesor del gobierno para estos temas, Patrick Vallance, quien dio a entender que la estrategia oficial era lograr la autoinmunidad de la población mediante la infección de una mayor cantidad de personas.
Según la criticada teoría de Vallance, para alcanzar la llamada «inmunidad del rebaño» sería necesario que al menos el 60 por ciento de la población británica, unos 36 millones de personas, contraigan el virus y se recuperen.
Al respecto, el profesor de la Universidad de Birmingham Willem van Schaik comentó a la BBC que aunque es casi imposible de predecir lo que eso significaría en términos de costos humanos, los pronósticos aún mas conservadores hablan de decenas de miles de muertos, y hasta de centenares de miles.