Washington, 8 abr (Prensa Latina) Nuevas revelaciones refuerzan hoy el criterio de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, restó importancia a la Covid-19, pese a conocer hace más de dos meses el potencial impacto de la pandemia en el país.
El medio digital Axios publicó dos comunicaciones que el asesor presidencial para la Economía, Peter Navarro, circuló en la Casa Blanca en enero y febrero en las que advertía sobre las cuantiosas pérdidas humanas y económicas que el coronavirus SARS-Cov-2, causante de la Covid-19, podría representar para Estados Unidos.
Los aspectos más negativos que le señalan a Trump en el manejo de la actual crisis sanitaria son, precisamente, la demora en admitir la dimensión de la pandemia aquí y al minimizar esto no tomar las medidas oportunas para que el gobierno federal adquiriera insumos médicos vitales.
Trump llegó a expresar que «nadie pudo haber pronosticado algo como esto», cuando Navarro había escrito en su primera comunicación fechada el 29 de enero que era prudente un control del ingreso al país de viajeros, en particular los procedentes de China, porque el primer brote reportado fue en la ciudad de Wuhan en diciembre.
Además, en el propio documento Navarro se refería a una pérdida estimada de seis mil millones de dólares para la economía estadounidense si no se adoptaba un plan preventivo oportuno.
En el segundo aviso, con fecha 23 de febrero, el funcionario empezaba diciendo que «hay una posibilidad creciente de que una pandemia avanzada Covid-19 pueda infectar a 100 millones de estadounidenses, y cause entre uno y dos millones de muertes».
Sin embargo, ese mismo día Trump, a una pregunta de la prensa en la Casa Blanca, respondió sobre el SARS-Cov-2 que «lo tenemos prácticamente bajo control en este país» y luego ese mismo criterio lo repitió en su cuenta en Twitter.
El mensaje de negación lo reiteró el 27 de febrero a líderes afronorteamericanos a quienes aseguró que el virus «va a desaparecer. Un día, es como un milagro, desaparecerá».
Menos de dos semanas después, el 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud declaró a la Covid-19 una pandemia global y entonces en un mensaje el día 17 del propio mes, Trump dio un giro a su retórica. «Siempre supe que esto es real, esto es una pandemia. He sentido que esto es una pandemia mucho antes de que lo llamaran pandemia», comentó.
Los resultados de estas semanas de retraso, confusión, luchas internas y esfuerzos constantes por parte de Trump y otros altos funcionarios de su administración por minimizar el riesgo saltan a la vista, indican analistas.
Estados Unidos es el epicentro mundial de la pandemia por el número de contagiados con la enfermedad, una cifra que sube cada día. De acuerdo con datos de la CNN, este miércoles el país se acerca a los 400 mil casos confirmados del nuevo coronavirus y supera las 12 mil 900 muertes.