Naciones Unidas, 15 abr (Prensa Latina) La decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de suspender fondos a la Organización Mundial de la Salud (OMS) podría calificarse como un crimen, ante la lucha que emprende hoy el mundo contra la Covid-19.
Así destacó la representante permanente alterna de Cuba ante Naciones Unidas, Ana Silvia Rodríguez, en su cuenta oficial en Twitter y recalcó que la acción del mandatario norteamericano es muy peligrosa.
La víspera, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su rechazo a la decisión del Gobierno estadounidense de suspender fondos a la OMS, en medio de la pandemia de Covid-19.
Por medio de un comunicado, el titular reiteró su apoyo a esa organización y recalcó que no es momento de reducir los recursos para las operaciones de esa entidad o de cualquier otra que lucha contra el nuevo coronavirus.
Miles de trabajadores de la OMS están ahora en la primera línea del combate contra la pandemia, apoyando a los Estados miembros de la ONU y sus sociedades, especialmente a los más vulnerables, con orientación, capacitación, equipos y servicios concretos para salvar vidas, subrayó.
La OMS debe ser respaldada en tales acciones, ya que es absolutamente fundamental en los esfuerzos del mundo para ganar la guerra contra el nuevo coronavirus, indicó Guterres.
Hace unos días, cuando Trump comenzó con sus amenazas de recortar fondos a la OMS, el director general de esa entidad, Tedros Adhanom Ghebreyesus, llamó a no politizar el enfrentamiento al nuevo coronavirus, pues esto podría traducirse en un número mayor de muertes.
«Apuntarnos con el dedo, eso es como jugar con fuego», dijo y pidió al Gobierno de Estados Unidos trabajar junto a China para enfrentar la pandemia.
En reiteradas ocasiones, Trump ha criticado el trabajo de la OMS y la acusa de equivocarse en sus recomendaciones y no alertar a tiempo sobre la expansión de la Covid-19.
Medios de prensa estadounidenses critican al jefe de la Casa Blanca por tratar de sacar provecho político del nuevo coronavirus, de cara a las elecciones de noviembre próximo.
Desde su llegada al poder, el actual mandatario norteamericano no cesa en sus ataques contra la ONU y sus agencias, de hecho, a varias de ellas recortó el financiamiento abruptamente y también abandonó entidades del organismo multilateral.
En 2018, Estados Unidos salió del Consejo de Derechos Humanos y a inicios de 2019, junto a Israel, se retiró de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Trump recortó el financiamiento de su país al Fondo de Población de las Naciones Unidas, y a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos, y se atrasa en los pagos a la ONU.
Además, decidió la retirada de la nación norteña del Acuerdo de París sobre cambio climático, del Pacto mundial sobre migración, y del acuerdo nuclear con Irán, firmado junto con Francia, Alemania, el Reino Unido, Rusia y China y apoyado por Naciones Unidas.
Varios Estados miembros de la ONU acusan también a Estados Unidos de incumplir con sus obligaciones como país sede de la organización multilateral, al negar visas a altos dignatarios y diplomáticos, y restringir el movimiento a los representantes de naciones acreditadas ante Naciones Unidas.