Manila, 12 may (Prensa Latina) El presidente filipino, Rodrigo Duterte, extendió hoy hasta el 31 de mayo el bloqueo y otras medidas de excepción en esta capital y algunas provincias de la isla de Luzón con alto riesgo de contagio con la Covid-19.
La decisión, sugerida por el grupo de trabajo interinstitucional sobre Enfermedades Infecciosas Emergentes, alcanza a Metro Manila (el principal núcleo urbano de la ciudad), a la de Cebú y a la provincia de Laguna.
Luzón, la mayor y más populosa isla del archipiélago -57 millones de habitantes, más de la mitad de la población del país- está bajo estricta cuarentena desde el 17 de marzo por ser el principal foco de irradiación del SARS-Cov-2, pero hay casos en todas las demás provincias.
Filipinas categorizó las zonas del país en de alto, medio y bajo riesgo. Las antes mencionadas continúan bloqueadas; en las segundas, las industrias y servicios públicos operan con un 75 por ciento del personal; las terceras siguen estándares mínimos que supuestamente garantizan la no infestación.
En medio de tales restricciones, expertos consideran que si la pandemia no cede en un plazo relativamente corto, la economía nacional sufrirá este año su primera contracción en más de dos décadas.
El gobernador del Banco Central, Benjamin Diokno, comentó que el Producto Interno Bruto probablemente solo crecerá 0,2 por ciento en 2020, lo que pondrá en quiebra las proyecciones del gobierno sobre la expansión de la economía hasta el 2022, entre el 6,5 y el 7,5 por ciento.
Pero la enfermedad no cede: a la fecha, los enfermos en el archipiélago ascienden a 11 mil 350 (la mayoría en la capital) y los fallecidos a 751. Este viernes a la lista de contagiados con la Covid-19 se sumaron 264 personas.