Madrid, 18 may (Prensa Latina) España comenzó hoy una salida paulatina de las restricciones impuestas a la movilidad, con el ingreso del 70 por ciento de su población en una nueva etapa de la desescalada del confinamiento por la pandemia de Covid-19.
Dos meses después de vivir una de las cuarentenas más estrictas del mundo, el 70 por ciento de los 47 millones de habitantes transita este lunes a la fase uno (de un total de cuatro) del desconfinamiento, un proceso que se prolongará hasta finales de junio.
Ante la evolución positiva de la Covid-19, la enfermedad causada por el coronavirus SARS-Cov-2, las autoridades sanitarias acordaron que 14 de las 17 comunidades autónomas (regiones) de esta nación ibérica recuperaran una tímida normalidad.
Eso significa que unos 32 millones de personas (el 70 por ciento de la población) pueden desde este lunes ir al pequeño comercio sin cita previa, disfrutar de una terraza en un bar o restaurante, aunque con aforo limitado, o ir a visitar a familiares.
Pese a que las ciudades vuelven a recuperar parte de su pulso habitual en esta lenta transición hacia la llamada nueva normalidad, los habitantes de Madrid y Barcelona, las dos urbes más castigadas por el nuevo coronavirus, deberán esperar unos días más.
Además de esta autonomía, de 6,7 millones de habitantes y que incluye a la capital de España, quedaron rezagadas Barcelona, metrópoli de la región nororiental de Cataluña (7,7 millones), y amplias zonas urbanas de Castilla y León.
El desconfinamiento de la Comunidad de Madrid se convirtió en un enfrentamiento político entre el gobierno de coalición progresista de Pedro Sánchez y el derechista Partido Popular (principal fuerza de la oposición), que gobierna esta región.
Sánchez inicio un plan para desmontar de forma gradual hasta finales de junio el férreo confinamiento social, vigente desde el pasado 14 de marzo, cuando decretó el estado de alarma.
Ese instrumento constitucional, que confinó a los ciudadanos para contener la rápida propagación del letal virus SARS-Cov-2, se mantendrá hasta el 24 de mayo, aunque el mandatario ya anticipó que solicitará al Congreso de los Diputados una nueva prórroga.
La intención del político socialdemócrata, que gobierna en coalición con la alianza izquierdista Unidas Podemos, es que esta quinta ampliación de la alarma abarque todo el proceso de desescalada de la cuarentena, el cual debe culminar a finales de junio.
Las regiones pueden solicitar pasar a las sucesivas fases, que implican más flexibilización, si muestran que cumplen con determinados parámetros, como disponer de suficientes camas en hospitales o tener capacidad para aislar fuentes de contagio.