México, 1 jun (Prensa Latina) La potente industria automotriz de México reabrió hoy sus puertas, pero en rojo, lo cual significa restricciones de labores, pues el país se encuentra todavía en el pico de la transmisión del SARS-CoV-2.
Los estados donde se arman vehículos y fabrican autopartes dieron el aval para que reabrieran como industrias esenciales salvo Puebla, donde están las plantas de Volkswagen, Audi, Rassini, ThyssenKrupp y Benteler.
La industria automotriz mexicana dio garantías de que por su culpa no va a haber ningún contagio, pues cumplen todos los protocolos establecidos por la Secretaría de Salud.
De todas formas, hay temor por la experiencia en la Industria Nacional de Autopartes en Estados Unidos de General Motors, Ford y Fiat Chrysler Automobiles, que abrieron el 18 de mayo y dos semanas después están con alertas por trabajadores enfermos, según reportes de agencias.
El negocio automotriz representa 3,8 por ciento del Producto Interno Bruto mexicano. Uno de cada tres dólares que entró al país por comercio exterior en 2019 provino de la manufactura de vehículos, que se frenó en todo el mundo cuando China fijó cerco sanitario.
De hecho, la pausa en la producción de México, establecida primero en el extranjero, implicó que en marzo las exportaciones de esa industria cayeran 6,4 por ciento y 77,1 en abril, indicaron fuentes del sector.
México es el séptimo productor de autos, cuarto exportador y quinto fabricante de autopartes. En este último aspecto, es el primero en proveer a Estados Unidos.
De acuerdo con el Centro de Investigación Automotriz, el 39 por ciento de las piezas que usan las armadoras de esa nación provienen de territorio mexicano.
Tras cambiar la reglamentación tres veces, el gobierno mexicano declaró esencial a la industria automotriz, la minería y la construcción, a mediados de mayo.
A partir del 18 de ese mes estuvo abierto el periodo para que el sector determinara el regreso a las actividades con la autoevaluación de seguridad sanitaria.
Las asociaciones mexicanas de la Industria Automotriz y Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones expusieron que aún no hay detalles sobre qué porcentaje comenzó a operar hoy, pero las aprobaciones tienen tiempos diferentes y cada empresa decide, siempre y cuándo se respete el semáforo según el color que les toque.
BMW, en San Luis Potosí; FCA, en estado de México y Coahuila; Nissan, en Aguascalientes; GM, en Guanajuato y Coahuila; Ford, en Sonora, y Toyota, en Baja California y Guanajuato, ya advirtieron que de manera gradual, con turnos escalonados, empiezan operaciones.
Puebla, donde residen 97 mil de los 980 mil trabajadores de la industria automotriz de manufactura, mantiene semáforo rojo por decreto del gobernador Miguel Barbosa y no reanuda labores.