Registra Reino Unido otras 176 muertes y mil 805 casos de Covid-19

Londres, 4 jun (Prensa Latina) El Reino Unido acumula 39 mil 904 muertes por Covid-19 y 281 mil 661 casos positivos a la enfermedad, tras anunciarse hoy el fallecimiento de otras 176 personas y mil 805 nuevos contagios.


El ministro británico de Transporte, Grant Shapps, informó este jueves en la rueda de prensa virtual diaria sobre la pandemia, que en las últimas horas se realizaron 220 mil 57 pruebas de Covid-19, para un poco más de cinco millones desde que comenzó el brote del nuevo coronavirus, mientras el número de pacientes hospitalizados asciende a siete mil 312.


La Covid-19 todavía es una amenaza muy real, advirtió Grant Shapps, tras recalcar que la lucha contra la pandemia «continúa».


Pese a esa advertencia, el funcionario adelantó que el 15 de junio se proseguirá con el levantamiento gradual de la cuarentena vigente desde el 23 de marzo pasado, que incluirá la reapertura de tiendas y comercios minoristas y el regreso de más estudiantes a las escuelas.


Shapps admitió que esa nueva desescalada provocará un aumento de la presión sobre el transporte público, por lo que desde esa fecha será obligatorio usar mascarillas o nasobucos para poder abordar los ómnibus y trenes.


El alcalde laborista de Londres, Sadiq Khan, reaccionó de inmediato al anuncio del gobierno conservador del primer ministro Boris Johnson sobre el uso de la mascarilla, y aunque dio la bienvenida a la medida, recordó que hacía tiempo lo había pedido.


Su correligionario y contraparte de Shapps en el llamado gabinete a la sombra, Jim McMahon, lo calificó como otro ejemplo de la lentitud del Gobierno a la hora de actuar contra la pandemia.


Dos meses atrás, los laboristas respaldamos el llamado del alcalde de Londres para que se impusiera el uso de la mascarilla en el transporte público, pero no es hasta ahora que los ministros actúan, remarcó.


La desescalada del confinamiento, que solo abarca a Inglaterra, porque los territorios semiautónomos de Gales, Escocia e Irlanda del Norte optaron por aplicar sus propios cronogramas y medidas, mantiene en ascua a gran parte de la población, por el temor de que se produzca un segundo pico de la pandemia.