México, 9 jun (Prensa Latina) Derivado de la búsqueda de contactos y de la vigilancia epidemiológica que realiza el Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS), dieron confirmados a Covid-19 otros tres funcionarios, informó hoy la entidad.
En un comunicado de prensa se señala la prueba confirmatoria al secretario general, Javier Guerrero, al director de Finanzas, Humberto Pedrero, y al titular de la Unidad de Evaluación de Delegaciones, Héctor Robles, y resultaron positivos a la enfermedad de Covid-19.
Los tres funcionarios se encuentran asintomáticos, en buen estado de salud, en confinamiento domiciliario, desde donde trabajan y coordinan las responsabilidades de sus respectivas áreas.
Al conocerse los resultados de la prueba se activó -como en todos los casos- el protocolo epidemiológico, con base en el cual se identificaron a los contactos cercanos para darles seguimiento.
Instalaciones administrativas del Instituto Mexicano del Seguro Social fueron y están siendo
higienizadas, y se han reforzado las medidas de sana distancia y los protocolos sanitarios como el lavado de manos, uso de alcohol gel al 70 por ciento y la toma de temperatura de todo el personal a su ingreso a estos edificios.
Las pruebas al personal dirigente del IMSS tiene que ver con su director genral, Zoé Robledo, quien dio positivo, al igual que su familia.
Lo preocupante es que se trata de funcionarios ligados muy estrechamiente al gabinete ministerial del presidente Andrés Manuel López Obrador y del equipo de científicos que atienden lo relacionado con la pandemia.
Esos dirigentes, en particular Robledo, son asistentes permanentes a las reuniones del gabinete de seguridad que se reúne todas las mañanas en el palacio Nacional con el mandatario, así como participan en las conferencias vespertinas de créditos y de salud.
Robledo había solicitado que se investiguen todos sus contactos, que son numerosos y de los más altos niveles del ejecutivo federal.
A una pregunta reciente de un periodista sobre si se había hecho o no la prueba confirmatoria, el presidente López Obrador respondió que no porque se sentía saludable y no tenía síntomas propios de la enfermedad.