De acuerdo con los reportes oficiales de la OMS, el 18 de junio se registró una cantidad inédita de nuevos enfermos a nivel internacional, más de 181 mil solo en esa jornada, y apenas tres días después el récord fue sobrepasado con los más de 183 mil contabilizados la víspera.
Tales datos evidencian la creciente velocidad de expansión del padecimiento, que ya acumula más de 8,8 millones de casos en todo el orbe y más de 465 mil fallecidos.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, manifestó hoy su alerta y señaló que frente a la rápida y letal propagación del coronavirus SARS-Cov-2, la única forma de garantizar la vida humana es fomentar la equidad y la solidaridad, por encima de diferencias políticas, sociales o económicas.
«La Covid-19 es el desafío y la oportunidad de nuestro tiempo, recordándonos que el único camino a seguir es estar juntos», aseguró en su cuenta de Twitter.
Por otro lado, La Comisión Europea (CE) defendió hoy que una estrategia conjunta es la forma más eficiente y solidaria de desarrollar, fabricar y distribuir una vacuna segura y accesible para todos contra la Covid-19.
En una reunión en el Parlamento Europeo, la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, afirmó que a nivel región diversas iniciativas buscan unir fuerzas en el tema de la inmunización, con la prioridad de garantizar su accesibilidad para todos.
No obstante, el Grupo de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica en el Parlamento Europeo alertó que «una vez que se descubra, gran parte de la población mundial no tendrá acceso al tratamiento debido a los altos precios o las políticas comerciales y limitaciones impuestas por una empresa».
También consideró que ello socavará negativamente el concepto fundamental de solidaridad y cooperación internacional, más necesarios que nunca en tiempos de crisis mundiales.
Este lunes varias entidades manifestaron la preocupación por las consecuencias de la pandemia en diversos ámbitos, como la distribución de antirretrovirales para las personas con VIH/Sida.
Una investigación de ONUsida indicó que algunas acciones adoptadas a raíz de la Covid-19, como el confinamiento y el cierre de fronteras, obstaculizan la producción y distribución de antirretrovirales, lo cual conllevaría a subidas de precios y problemas de distribución.
Por ello, la directora ejecutiva de esa entidad, Winnie Byanyima, pidió a los países y distribuidores «planes urgentes» para evitar tales dificultades, en un contexto en que casi 25 millones de personas en el mundo necesitan esos medicamentos.