Pobreza extrema aumenta por efectos del Covid-19: Banco Mundial

Ginebra, 8 jul (Prensa Latina) La directora administrativa del Banco Mundial (BM), Mari Pangestu, reconoció hoy que es la primera vez en 20 años que la pobreza extrema mundial aumenta debido a los efectos de la Covid-19.


En su intervención en la videoconferencia organizada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para examinar el impacto de la pandemia en el mercado laboral, Pangestu mostró preocupación por puestos de trabajos deficientes a nivel global.


Dijo que en la actualidad nueve de cada 10 países donde aún hay cierres empresariales por la enfermedad, de abril a junio, el número de horas trabajadas son 20 por ciento inferiores a las de 2019.


También certificó que las mujeres y los jóvenes son los segmentos más afectados y de grandes desigualdades frente al trabajo.

Señaló que los trabajadores y sus familias sufren en momentos que la tasa de pobreza extrema aumenta de ocho por ciento en 2019 a sobrepasar el nueve por ciento este año.


Insistió en que los efectos de la pandemia son inmensos para una crisis que revela la gran vulnerabilidad del empleo informal, mayoría para los países en desarrollo.


Reseñó que la generalidad de las personas sin ingresos periódicos y sin acceso a la protección social son mujeres, además de carecer de opciones para el teletrabajo.


Significó que identificaron en el BM más de mil medidas hasta la fecha para responder a la pandemia en casi todos los países.


Pese a no dar detalles, reflejó que el BM apoyará a los países con 160 mil millones de dólares durante los próximos seis meses para resolver choques económicos, sanitarios y sociales.


Ejemplificó con una ayuda de mil millones de dólares para la India, encaminada a la asistencia a los de menos recursos, afectados por la enfermedad.


Reclamó que es el momento de dar pasos ambiciosos para reconstruir mejor y crear una recuperación resiliente para garantizar un mejor futuro al trabajo.


Se pronunció por la creación de mejores empleos bajo el signo de cuatro fases que incluyen puestos en industrias con ganancias, sobre todo las que producen bienes públicos, fomentar pericias y competencias, confrontar las desigualdades y crear sistemas que protejan a todos.


También se inclinó por alianzas y colaboraciones internacionales para esas mejorías en cuanto al trabajo y los empleos, aunque careció de recetas a los efectos de resolver las necesidades de los más pobres, resaltadas ahora con la Covid-19.