Lexington, EE.UU., 2 ago (Prensa Latina) Los organizadores de las carreras de automóviles IndyCar, a disputarse el 7 y 9 de agosto en el circuito de Mid-Ohio, decidieron aplazarlas debido al impacto de la pandemia de la Covid-19 en Estados Unidos.
Ante esta medida de posponer las pruebas para buscar una nueva fecha en septiembre u octubre, la IndyCar no regresará a la competición hasta la carrera de Indianápolis 500 el 23 de agosto, con la posible participación del español Fernando Alonso.
«Esta decisión fue tomada debido a las circunstancias existente y en coordinación con las autoridades sanitarias locales», precisaron en el comunicado.
En la actualidad, Estados Unidos es el país con más contagios por el patógeno en el mundo con un total de más de cuatro millones y medio de casos confirmados, según la Organización Mundial de la Salud.
Los responsables del trazado de Mid-Ohio respaldaron la iniciativa del circuito de Madison (Illinois) y el autódromo del Indianapolis Motor Speedway para ayudar a completar el calendario de la IndyCar después de la anulación de las pruebas de la costa oeste en Portland y Laguna Seca.
Este año los promotores de la IndyCar ya pospusieron la carrera de San Petersburgo (Rusia), que marcaría el inicio de temporada y que ahora la cerrará. A ello se sumaron la cancelación de Toronto, Portland e IndyCar previstas para el circuito de Mid-Ohio.