La Habana, 2 nov (Prensa Latina) A escasas 24 horas, los estadounidenses irán a las urnas para decidir quién será el próximo presidente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump o el demócrata Joe Biden.
La incertidumbre es protagonista en el día final de una carrera por la Casa Blanca que la mayoría de los expertos consideran la más caótica en la historia moderna del país.
La pandemia del coronavirus, que ya registra cerca de nueve millones 208 mil 874 infectados y cerca de 231 mil fallecidos, echó por tierra la muy probable reelección de Trump, y llevó a la economía a una crisis recesiva con un alto desempleo, lo cual descarriló el centro de la campaña del republicano.
Numerosos especialistas, académicos y funcionarios estadounidenses advirtieron en las últimas semanas sobre una posible situación caótica tras conocerse los resultados de las elecciones del 3 de noviembre en la nación norteña.
Entre las causas de ese posible escenario está el aumento inusual de la cantidad de votantes que este año ejercieron el derecho al sufragio de forma adelantada y en particular por correo, (casi dos tercios de lo que lo hicieron en 2016 ya depositaron su voto).
El republicano no se cansó de hablar de la posibilidad de un supuesto fraude electoral, sin presentar pruebas al respecto y nunca se comprometió a aceptar los resultados y a comprometerse con una transferencia pacífica del poder.
Sembró la duda sobre el voto por correspondencia, opción que muchos ciudadanos prefieren por temor a la pandemia de la Covid-19.
Aunque el análisis de los estudios de opinión pública en los distritos decisivos muestra que la carrera por la presidencia tiene un favorito claro, Biden, el actual mandatario pretende declararse ganador en las elecciones de mañana si los resultados iniciales le son favorables.
El sitio digital Axios afirma que el gobernante republicano, dijo a algunos confidentes que declarará su victoria si parece que «está por delante».
Esa posibilidad está latente si demoraran en conocerse los resultados finales de los comicios, cuando se estima que en la medianoche del martes podría haber una gran cantidad de votos no contados en estados clave como Pensilvania.
Hasta ahora el pronóstico de las encuestas indica que Biden lidera con mucha claridad las proyecciones de intención de voto. El 52 por ciento de las personas que irían a votar ※o que ya lo hicieron de forma anticipada※ dice que lo hará por el exvicepresidente, frente a un 43 por ciento que se inclina por Trump, según el sitio especializado FiveThirtyEight.
En la actualidad Biden lidera en 20 estados y en la capital del país. En 18, por más de 10 puntos de diferencia, y en los tres restantes por entre cinco y diez puntos. Entre los 21, suman 233 delegados al Colegio Electoral, solo 37 menos de los que necesita para ganar la elección.
Mientras Trump está menos cerca de mantenerse en la Casa Blanca pese a que está al frente con cierta holgura en 20 estados ※en 14 por más de 10 puntos y en seis por entre cinco y diez※, son casi todos poco poblados y suman solo 126 electores, 144 menos de los que requiere para ser reelecto.
En este momento, hay alrededor de diez estados peleados, incluyendo algunos como Texas y Florida, con un alto número de votos electorales.
Por otra parte, al escenario de tensión marcado por la incertidumbre, los estadounidenses muestran preocupación por los posibles actos de violencia con motivo de las elecciones, principalmente por los seguidores del aspirante a la reelección.
En medio de la crisis, está el Departamento de Defensa, donde los principales generales de las fuerzas armadas podrían renunciar si Trump les ordena reprimir con tropas las posibles protestas tras las elecciones del 3 de noviembre, reveló el diario The New York Times.
Recientemente, en Pensilvania, Trump dijo a sus seguidores «Ya sabes lo que quieren hacer ahora, ¿no?». «Quieren contar todos los votos. Todos los votos. Cada voto. Quieren contarlos. Dije: «¿Por qué? ¿Por qué contarlos? ¿Por qué necesitamos hacer eso?
«Dijeron: ‘Sr. Presidente, necesitamos contar los votos para ver quién tiene más votos. Para ver quién es el Presidente’, apuntó.
Sin tapujos, el mandatario afirmó:»No necesitamos contar los votos. Sabemos quién es el Presidente. Yo soy el Presidente. Votaron por mí para ser Presidente y soy Presidente y todos ustedes me aman. Realmente lo hacen. Y yo os quiero a vosotros».
Esta idea de ‘contar votos’. Es una locura. Realmente lo es», afirmó.
«Yo digo que juntemos todos los votos. Los miramos. Conseguimos que la gente inteligente los mire y decimos que soy el Presidente y entonces podemos volver a hacer grande a América otra vez, otra vez.»
Las declaraciones del gobernante suman más leña al fuego de la incertidumbre. ¿Por quién votarán los estadounidenses? Trump o Biden.