Washington, 13 nov (Prensa Latina) El Partido Republicano de Estados Unidos sufre hoy profundas divisiones tras la denuncia de fraude electoral del actual presidente, Donald Trump, con regiones que le apoyan y otras contrarias a esas acusaciones.
La polarización de la organización queda en evidencia si se analiza que algunos republicanos de Washington siguen firmes en su respaldo a Trump, mientras dirigentes en otros lugares del país instan ya a reconocer al demócrata Joe Biden como presidente electo y tratarlo como tal.
El gobernador de Nueva Hampshire, Chris Sununu, quien respaldó la reelección del magnate, se sumó a las voces republicanas contrarias a las versiones infundadas sobre irregularidades en los comicios.
Así, opinó que la ventaja de Biden «se agranda día a día» y con ello se disipan las posibilidades de Trump de retener el cargo.
«Joe Biden es el presidente electo y como la mayoría de los estadounidenses sospecho que prestará juramento en enero», dijo Sununu.
Agregó que no hubo fraude en su estado, donde Biden ganó por un margen amplio.
En este contexto, la resistencia de una buena parte de los correligionarios del presidente complica los esfuerzos de Biden para encabezar una transición sin tropiezos, al negarle acceso a los fondos y recursos habitualmente asignados para ese proceso.