Washington, 25 nov (Prensa Latina) El ataque del presidente Donald Trump a la legalidad de las elecciones dejará una huella negativa duradera en la democracia estadounidense, señala hoy el diario The Washington Post.
Según el texto, durante las últimas tres semanas, debido a que Trump se negó a conceder el triunfo al virtual presidente electo, Joe Biden, el gobierno federal, el equipo legal del mandatario y sectores del Partido Republicano trabajaron en conjunto para interferir con la transición pacífica del poder.
Cuando Biden preste juramento el 20 de enero, enfrentará un desafío fundamental a diferencia de cualquier mandatario anterior: decenas de millones de norteamericanos dudan de su legitimidad y cuestionan la estabilidad de las tradiciones democráticas del país, añade el rotativo.
Esto se debe en parte al intento sin precedentes de su predecesor de incendiar el sistema de participación política ciudadana antes de dejar el cargo, destaca el artículo escrito por Toluse Olorunnipa, Michelle Ye Hee Lee y Rosalind S. Helderman.
Al presentar afirmaciones infundadas de fraude electoral y aceptar, o negarse a rechazar, teorías de conspiración extravagantes sobre los comicios, Trump y sus aliados normalizaron el tipo de asalto postelectoral que normalmente se observa en democracias menos desarrolladas, según expertos de todo el espectro político consultados por el Post.
Al respecto, Michael Chertoff, secretario de Seguridad Nacional durante el gobierno de George W. Bush (2001-2009) señaló que el daño prolongado al sistema electoral del país podría ser uno de los legados más importantes de la presidencia de Trump, y es un efecto que no debe subestimarse.
Entretanto, Trump continúa declarándose ganador de los comicios, incluso cuando varios estados clave ya certificaron la victoria de Biden y el gobierno federal autorizó el inicio de la transferencia de poder a la nueva administración.
Pero mientras Trump intentó sin éxito ganarse a los jueces y legisladores estatales, el liderazgo de Biden se mantuvo seguro y creció a nivel nacional a medida que se procesan más boletas, y hasta ayer, el total de votos populares del político demócrata superó los 80 millones, el mayor en la historia del país, añade el periódico.
Aún así, las repetidas afirmaciones de Trump sobre manipulación electoral provocaron que muchas de las 74 millones de personas que votaron por él lleguen a dudar de la confiabilidad del proceso de votación.
Incluso, el gobernante prosiguió su arremetida mientras avanza la transición, después que la Administración de Servicios Generales anunció el lunes por la noche que la administración podría comenzar a coordinarse con el equipo entrante de Biden, concluye el artículo del Post.
En medio de este ambiente de imprecisiones, Biden anunció ayer públicamente en Wilmington, Delaware, su equipo de política exterior y seguridad nacional, en un acto en el que estuvo presente la vicepresidenta electa, Kamala Harris.