Washington, 8 dic (Prensa Latina) El Ejército estadounidense comunicó hoy el despido o suspensión de 14 soldados y oficiales, incluidos dos generales, por crear un ambiente permisivo de abuso y acoso sexual en la base militar de Fort Hood, Texas.
Allí fue asesinada la soldado Vanessa Guillén, de 20 años de edad y quien desapareció el 22 de abril de 2020 poco después de haber contado a su familia que resultó acosada sexualmente por uno de sus sargentos en la instalación castrense.
Los restos de la joven fueron hallados el 30 de junio y su presunto victimario, Aaron David Robinson, se suicidó cuando policías procedieron a interrogarlo.
Ryan McCarthy, secretario del Ejército, reconoció este martes ante reporteros que la investigación sobre la muerte de Guillén identificó fallos en los mecanismos para atender las denuncias de acoso y abuso sexual, y un clima que tolera esos problemas.
De acuerdo con McCarthy, quien ordenó a mediados de julio formar una comisión para esclarecer este caso, bajo la guía de cinco civiles, los mandos no han tratado a los soldados con el debido respeto.
Por otra parte, el titular anunció que a partir de mayo próximo se aplicarán en el Ejército de Estados Unidos nuevas normas para el manejo de las situaciones de acoso y abuso sexual, y la localización de los soldados ausentes.
Como parte de los oficiales castigados están los generales Scott Effland, al mando de la base de Fort Hood cuando Guillén desapareció, y Jeffrey Broadwater, comandante de la Primera División de Caballería en el mismo lugar.
Reportes de prensa expusieron que este año al menos 31 soldados perecieron en dicha infraestructura militar en circunstancias violentas o accidentes.