México, 29 dic (Prensa Latina) México ya vacunó a nueve mil 500 médicos, enfermeras y otro personal de salud directamente ligados a pacientes de la Covid-19, informó hoy la Secretaría de Salud.
El director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), Ruy López Ridaura, dijo que de esa manera se cumple el plan de priorizar a ese personal con la Pfizer-BionTech.
Explicó que las vacunas están a menos 70 grados centígrados, lo cual facilita mantenerlas a temperatura de congelamiento por varios días e ir descongelando cada una de las charolas que contienen 970 dosis.
La planeación sobre las charolas que se sacan día con día se tiene que hacer con mucho detalle y es parte del concepto de calibración, que consiste en conocer cada uno de los momentos, cuánto, cómo se sacan y cuántas se requieren en cada uno de los sitios de vacunación.
En esta primera etapa del plan de vacunación, reiteró, la prioridad son trabajadores de todas las instituciones públicas de salud, que enfrentan un riesgo mayor de contagio al estar en la atención directa o cercana a pacientes con Covid-19.
La inmunización se ampliará de forma progresiva para el resto del personal sanitario, detalló.
Pfizer/BionTech es la única vacuna aprobada hasta ahora en México, explicó, con cuyo laboratorio se tiene un contrato de provisión progresiva, ya que está hecha con base en la plataforma molecular ARN mensajero, la cual requiere estabilidad y cadena de frío a -70 grados centígrados para su conservación.
El director general del Cenaprece insistió en la necesidad de que se reconozca al personal de salud como las grandes heroínas y héroes que han estado al frente de la batalla durante más de 10 meses de trabajo intenso.
López Ridaura advirtió que aun cuando comenzó el proceso de vacunación, debe haber una corresponsabilidad por parte de la población con la práctica de medidas básicas de prevención: sana distancia de más de dos metros de otras personas.
En lo posible, señaló, quedarse en casa, sobre todo en esta época de festividades de Año Nuevo, y evitar reuniones familiares debido a que es alta la posibilidad de transmisión y de que se traduzca en mayores hospitalizaciones y fallecimientos.