Londres, 23 feb (Prensa Latina) Turismo y viajes tienen marcado sello para la economía de muchos países, ahora afectados por la pandemia de la Covid-19, lo que motiva hoy la reconsideración de estos sectores en muchos medios especializados.
Es el caso de una reciente publicación de la revista británica The Economist, con augurios muy apegados a la situación real de poco más de un año debido a la enfermedad.
De esa suerte, las academias observan con detalle estas opiniones, que en mucha medida ya se puede apreciar y podría, definitivamente, constituir patrón para el futuro a mediano y largo plazos.
La publicación señala 20 puntos a tener en cuenta con su correspondiente influencia, y al tomar sólo algunos de ellos apreciamos un cambio radical. En primer lugar, pese al deseo humano de volver a sociabilizar, el trabajo a distancia será primordial.
Por tanto, los expertos prevén que seguiremos laborando en línea desde las casas, cada vez mas adaptadas a dichos menesteres.
De ahí que consideren para las futuras reuniones, al margen de la desaparición de la pandemia, lugares divertidos y diferentes cada mes para satisfacer el deseo de sociabilizar, pero sosteniendo el teletrabajo.
Se crearán a esos efectos -dice la revista- múltiples espacios para grandes juntas digitales con todas las soluciones a la mano (pensar en la tecnología 5G de comunicaciones móviles).
Pero los puntos de The Economist son mucho más y bien explicados, como el cierre de un porcentaje alto de oficinas, que califica de modelo atrasado. Cada día aparecerán más asistentes digitales.
Las grandes corporaciones serán recordadas, mientras los hoteles de trabajo desaparecen en 50 por ciento, con la disipación de los viajes de congresos y reuniones, tal como se les recuerda.
El turismo de trabajo desaparece prácticamente, y las llamadas se transforman en video-llamadas, por tanto las juntas internacionales pasarán a Juntas en línea.
Los grandes congresos entonces son sustituidos por sistemas tecnológicos y las presentaciones de productos llegarán de manera digital.
Las casas más tecnológicas, la productividad se revisa en diferentes plataformas para medir resultados, todo lo repetitivo se vuelve virtual, y las empresas que no inviertan al menos 10 por ciento en nuevas tecnologías desaparecerán.
Sin embargo, los entendidos británicos adelantan el regreso del turismo por entretenimiento, fortalecido y siempre acompañado de mucha tecnología, en cuanto a operación y compra, cuando la gente apreciará más que nunca visitar lugares naturales y aislados.
De tal manera, el Planeta se verá obligado a innumerables cambios laborales, financieros y económico-comerciales que quedarán para un futuro, en algún momento apreciado como de ciencia ficción.