Washington, 18 mar (Prensa Latina) El mandatario de Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris, se reunirán mañana con líderes asiático-americanos en Atlanta, tras un reciente tiroteo allí, confirmó hoy la Casa Blanca.
De acuerdo con el cronograma previsto, se espera que ambos tengan encuentros con legisladores estatales y defensores de esa comunidad y también la de las islas del Pacífico, para hablar sobre el aumento de los ataques contra esos grupos en medio de la pandemia de Covid-19.
Antes del tiroteo en Atlanta, Biden y Harris ya habían planeado viajar a esa ciudad como parte de la gira Help is Here (La ayuda está aquí), centrada en promocionar las disposiciones del paquete de asistencia económica frente a la Covid, reporta The Hill.
Tras ese suceso, su reunión con estadounidenses de origen asiático ofrecerá una oportunidad para mostrar solidaridad con esa comunidad, contra la cual crecen las agresiones, añade ese medio.
Ocho personas murieron a tiros a inicios de este semana en tres centros de masajes del área de Atlanta: seis eran mujeres asiáticas, de acuerdo con la policía local.
Las autoridades dicen que es demasiado pronto para determinar si los asesinatos fueron por motivos raciales, pero los acontecimientos han provocado intensos temores sobre los ataques contra los asiático-americanos.
Biden y Harris, expresaron la víspera preocupación por cualquier manifestación de violencia contra la comunidad asiática y manifestaron solidaridad con ese grupo de población.
Un análisis publicado por el Centro para el Estudio del Odio y el Extremismo de la Universidad Estatal de California, en San Bernardino, también advierte sobre este problema.
La investigación encontró que los delitos de odio contra los asiáticos en las ciudades más grandes de Estados Unidos aumentaron casi un 150 por ciento en 2020.
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el miércoles que la retórica del expresidente Donald Trump sobre el coronavirus SARS-CoV-2, al que se refirió como el «virus de China», contribuyó a la discriminación y violencia contra la comunidad asiática.