Naciones Unidas, 27 mar (Prensa Latina) La creciente brecha entre países ricos y pobres es hoy preocupantemente regresiva y requiere una corrección inmediata del rumbo, dijo Liu Zhenmin, subsecretario general del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de Naciones Unidas
Al frente del equipo que elaboró el informe sobre Financiamiento para el Desarrollo Sostenible 2020, Zhenmin indicó se debe ayudar a los países no solo a mantenerse a flote financieramente, sino también a invertir en su propio desarrollo.
«Para reconstruir mejor, tanto el sector público como el privado deben invertir en capital humano, protección social e infraestructura y tecnología sostenibles», aseguró.
La inversión sostenible e inteligente en infraestructura reduciría los riesgos y haría que el mundo fuera más resistente a las crisis futuras, crearía crecimiento, permitiría una vida mejor para millones de personas y combatiría el cambio climático, advirtió el funcionario de la ONU.
Se estima que invertir entre 70 mil y 120 mil millones de dólares durante los próximos dos años, y entre 20 mil y 40 mil millones a partir de entonces, reduciría significativamente la probabilidad de otra pandemia, unas cifras que contrastan con los billones de dólares perdidos por los daños económicos causados por Covid-19.
Sin embargo, a diferencia de sus contrapartes desarrolladas, la mayoría de los países en desarrollo no tienen el espacio fiscal para tal inversión, por lo que el mencionado informe recomienda proporcionar financiación a largo plazo, por ejemplo, más de 50 años, a los países en desarrollo a tasas de interés fijas, para aprovechar las actuales históricamente bajas.
También propone utilizar mejor los bancos públicos de desarrollo como herramienta para la inversión en desarrollo sostenible, y reorientar los mercados de capitales hacia la alineación con el progreso sostenible eliminando los incentivos a corto plazo a lo largo de la cadena de inversión.
El Informe sobre Financiamiento para el Desarrollo Sostenible 2021 plantea que la economía global ha experimentado la peor recesión en 90 años, con los segmentos más vulnerables de las sociedades afectados de manera desproporcionada.
Asimismo, reconoce la pérdida de 114 millones de puestos de trabajo y alrededor de 120 millones de personas de regreso a la pobreza extrema.
El texto refiere, además, que la cifra histórica de 16 billones (millón de millones) de dólares en fondos de estímulo y recuperación que las naciones han destinado a la crisis por la Covid ayudaron a evitar los peores efectos, pero menos del 20 por ciento de esa suma se gastó en países en desarrollo.