Washington, 16 abr (Prensa Latina) Las autoridades estadounidenses investigan hoy un tiroteo masivo en el que un hombre armado mató a ocho personas e hirió a varias más antes de suicidarse en cerca del aeropuerto de Indianápolis.
Cinco personas están hospitalizadas, una de ellas con heridas graves, otras dos fueron tratadas y liberadas en el lugar, dijo la portavoz de la policía Genae Cook, mientras voceros de la agencia de servicios de correspondencia FedEx dijeron que algunos empleados de esa entidad estaban entre los muertos.
El tirador no fue identificado de inmediato y los investigadores realizan interrogatorios de rigor, por lo que Cook dijo que era demasiado pronto para saber si el atacante era un trabajador de la instalación de FedEx, donde fueron hallados los cadáveres.
La policía recibió informes de disparos el jueves poco después de las 23:00, hora local, y los oficiales «entraron en contacto con un tirador activo que después se suicidó», añadió Cook. El alcalde de Indianápolis, Joe Hogsett, lamentó que la ciudad «se enfrentó a la terrible noticia de otro tiroteo masivo, un acto de violencia sin sentido que cobró la vida de ocho de nuestros vecinos».
Este fue al menos el tercer incidente armado de este año solo en Indianápolis, donde cinco personas, incluida una mujer embarazada, fueron asesinadas a tiros en enero, y un hombre fue acusado de matar a tres adultos y un niño antes de secuestrar a su hija durante una discusión en una casa en marzo.
La pasada semana el presidente Joe Biden emitió órdenes ejecutivas destinadas a enfrentar la violencia con armas de fuego, y consideró que el problema constituye una epidemia y una vergüenza.
El lunes al menos un adolescente murió y un oficial de policía fue herido en un tiroteo en una escuela secundaria de la ciudad de Knoxville, en el estado de Tennessee.
Una acción similar ocurrió horas antes en una playa del sur de California cuando una manifestación de supremacistas blancos chocó con unos 200 movilizados del movimiento Black Lives Matter.
Entretanto, un hombre armado mató la semana pasada a cinco personas incluyendo un prominente doctor, en Rock Hill, una ciudad de Carolina del Sur.
Otro tiroteo masivo tuvo lugar en las primeras horas del 3 de abril en una fiesta en una casa en Wilmington, Carolina del Norte, que provocó la muerte a tres personas e hirió a otras cuatro.
El 22 de marzo pasado hubo un incidente de ese tipo en Boulder, Colorado, donde murieron 10 personas, y un hecho similar en Atlanta, Georgia, con seis mujeres asiáticas muertas el 16 de marzo, así como otro el 1 de abril en Orange, California, en el cual resultó occiso un niño y otras dos personas fueron lesionadas.